Empezó la temporada de declinaciones… y las que faltan

INE rechaza fraude electoral
Foto: Reto Diario

Cuando faltan menos de tres semanas para las elecciones más grandes de la historia se ha desatado una temporada de declinaciones de facto, producto de negociaciones en lo oscurito, que, aunque no tendrán efectos directos, algunas de ellas sí pueden influir en el comportamiento de los votantes.

Sin duda, la que más impacto mediático ha ocasionado es la declinación del candidato de Movimiento Ciudadano al gobierno de Sonora, Enrique Bours Casteló, pues se da en momentos en que el abanderado de Morena-PT, Alfonso Durazo, se despegaba del candidato de PRI-PAN-PRD, Ernesto Gándara.

Bours Casteló tenía una intención de voto del diez por ciento. Y aunque esos diez puntos no se trasladarán de manera automática hacia el proyecto político de Gándara, sí representan una suma considerable de votos potenciales que, por el contexto en que se dio la declinación, una buena parte de ellos podría ser cachada por el ex priista.

¿Y cómo están las declinaciones?

Pero no todas las declinaciones son útiles. Por ejemplo, la declinación del candidato de Redes Sociales Progresistas al gobierno de Michoacán, Abraham Sánchez Martínez, a favor del abanderado de Morena, Alfredo Ramírez Bedolla, de poco servirá, porque el propio morenista no está del todo posicionado debido a que es candidato sustituto.

Se habla de que esta declinación fue negociada directamente por las cúpulas de Morena con la exlideresa del SNTE y poder tras el trono de RSP, Elba Esther Gordillo.

Un caso distinto es el de Sinaloa, en donde el candidato del PVEM al gobierno del estado, Tomás Saucedo, declinó a favor de su similar de Morena, Rubén Rocha Moya, y llamó sus simpatizantes a hacer efectivo el voto útil.

Los votos del PVEM en Sinaloa sí pueden inclinar la balanza a favor de Morena, pues se da en momentos en que el candidato del PRI, Mario Zamora Gastélum, le pisaba los talones.

Hay unas que sí vale la pena comentar…

Otra declinación importante fue la que se dio el pasado lunes cuando en pleno debate, la candidata al gobierno del PES, Liliana Becerril Rojas, decidió a favor de la abanderada de PRI-PAN-PRD-PAC-PS, Anabell Ávalos Zempoalteca.

Si bien Liliana no figuraba en las encuestas, su declinación puede generar un efecto mediático y psicológico en momentos en que la contienda, que Morena creía tener ganada, se ha cerrado por el repunte de la priista en los últimos días y la tendencia a la baja del partido en el poder a nivel general.

Otra declinación de relevancia que afectó severamente a Morena fue la de quien fuera su candidato a la Presidencia Municipal de Monterrey, Víctor Fuentes que, aunque es a nivel municipal, no se trata de cualquier ciudad, sino de la tercera capital en importancia luego de la Ciudad de México y Guadalajara.

Sí, es temporada de declinaciones y de negociaciones en lo oscurito para impulsarlas. Se rumora en círculos políticos y en medios de San Luis Potosí que la candidata de Morena al gobierno del estado, Mónica Rangel, podría declinar de un momento a otro a favor del panista Octavio Pedraza, quien compite por la alianza PRI-PAN-PRD.