Los resultados de la absurda consulta popular realizada ayer nos permiten confirmar que el voto a favor de Andrés Manuel López Obrador va en caída libre y que está muy lejos de los niveles alcanzados cuando ganó la Presidencia de la República.
En las elecciones del 2018 López Obrador obtuvo 30 millones 113 mil 483 votos. Tres años después, en las elecciones del pasado seis de junio, Morena obtuvo solo 16 millones 759 mil 917 votos, es decir, prácticamente la mitad.
Pero en la consulta “gansito” realizada ayer, promovida por el presidente López Obrador y por Morena, votaron por el “Sí” únicamente seis millones 371 mil 76 ciudadanos, lo que representa casi la tercera parte de los votos obtenidos por el partido en el poder el seis de junio.
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A pesar del acarreo, del uso faccioso de los medios del Estado y de la propaganda engañosa por medio de carteles con los rostros de cuatro ex presidentes, Morena solo pudo llevar a las urnas a seis millones 473 mil 70 ciudadanos, casi la quinta parte de los votos con los que López Obrador ganó la Presidencia en 2018.
Y de esa cantidad, 101 mil 994 ciudadanos votaron por el “No”, lo que quiere decir que más de 100 mil votantes acudieron a las urnas pero solo para hacer patente su rechazo a una consulta absurda.
La cantidad de gente que participó en este ejercicio representa apenas el doble de los militantes que dice tener Morena, pues según sus documentos oficiales, tiene tres millones 72 mil afiliados.
El gran desdén nacional que sufrió la consulta “gansito” seguramente tiene preocupadas a las cúpulas de Morena, por la evidente baja que registra este partido en su capacidad para movilizar a las masas.
Sí, los líderes de todo eso que llaman “Cuarta Transformación” están preocupados. Aunque en público digan lo contrario.
