Diputados desalojan el Congreso… pero hasta las televisiones se llevaron

Los legisladores salientes de la LXIII Legislatura, tuvieron que desalojar las oficinas del Congreso, tarea para la cual sólo tenían hasta el pasado 10 de agosto. Pero no perdieron ni un minuto, puesto que cargaron con cuadros y hasta televisiones.

En el lugar aún había cajas cerradas, así como cuadros descolgados de las paredes y envueltos en hule espuma, mientras que las oficinas que ya contaban con sellos sólo contaban con el escritorio y el teléfono.

Legisladores de todos los grupos parlamentarios estuvieron trabajando a “marchas forzadas” para desalojar sus espacios de trabajo. E incluso, según lo informado por el diario Reforma, una mujer que cargaba una televisión junto a las oficinas del PRI, quien alegó que se trataba de un área privada para evitar ser fotografiada.

Ante la presencia de las cámaras, llegaron más persona, quienes aseguraron que San Lázaro era un espacio privado de los diputados, aunque admitieron que por estos días se llevan hasta las televisiones que pueden ser usadas para beneficio personal.

Pese a que será hasta el 31 de agosto cuando acabe el periodo de esta legislatura, el pasado 9 de agosto, ya casi no había ni un diputado por los pasillos, mientras que el morenista Miguel Alva y Alva, que caminaba por el patio también coincidía en que los diputados se llevaban todo, aunque prometió que “ya va a cambiar este derroche”.

Al inicio de la LXIII Legislatura, se otorgó a cada una de las 8 bancadas, una subvención fija de 1 millón de pesos mensuales para sus oficinas y actividades, más una subvención variable de 116 mil pesos al mes por cada diputado, que en enero de 2016 subió a 132 mil pesos.

Hubo incluso quejas irónicas por parte de los empleados de limpieza, quienes aseguraron que “todo lo bueno se lo llevan, nada nos dejan a los pobres”.