A la par de que el gobernador de Veracruz, Javier Duarte, es señalado por endeudar al estado, “el otro Duarte”, César Duarte, es cuestionado por las deudas que mantiene como gobernador de Chihuahua.
Aunque el gobernador priista de Chihuahua ya va de salida—y ante las críticas—, el Gobierno estatal solicitó una deuda por más de seis mil millones de pesos; lo que terminó por levantar más ámpula en los chihuahuenses.
Cabe señalar que días antes, una asociación civil presentó un juicio de amparo para impedir esta deuda y se argumentó que los diputados del estado mintieron ante el juez primero de distrito de Chihuahua para “adquirir la deuda” mediante la bursatilización de bonos carreteros. Es decir que para algunos, los diputados del PRI libraron con mentiras la bursatilización de Duarte.
Pero tan solo unos días atrás, el juez primero negó la suspensión definitiva en las demandas de amparo promovidas por la asociación civil.
Al respecto, la diputada priista Laura Enriqueta Domínguez, presidenta del Congreso estatal, afirmó que la deuda solicitada es lícita y aclaró que los recursos serán utilizados para pagar pendientes, así como para la seguridad social de los trabajadores del estado y para proyectos productivos. Eso sí, Enriqueta Domínguez aseguró que actuaron de forma responsable pues no se prestarían a engañar a ningún juez.
Sin embargo, el gobernador electo del estado, Javier Corral pidió aclarar si los diputados mintieron al juez. De acuerdo con Corral, el juzgador deberá valorar “si fue sorprendido, si lo engañaron y sobre todo, la inconstitucionalidad del acto” pues “está absolutamente prohibido endeudarse para gasto corriente”. Y es que por donde se vea, la adquisición de más deuda va a comprometer la administración del panista Corral.
Mientras los estados se endeudan y se endeudan, en el caso de Chihuahua ¿Quién miente? ¿Se va a castigar este “agravio a los chihuahuenses”?
