Describen en juicio lujosa vida de “El Chapo”

Continúa el juicio en contra el narcotraficante más reconocido en la historia de México, Joaquín “El Chapo” Guzmán, en esta ocasión tocó el turno de Miguel Ángel Martínez  Martínez, “El Gordo” o “El Tololoche”, para dar su testimonio.

En él, Martínez detalla los lujos que rodeaban la vida de “El Chapo” en el año de 1990, cuando supo aprovechar una tendencia de cocaína en los Estados Unidos, justo después de salir de la pobreza en su natal Sinaloa.

De un día a otro, cuenta, Guzmán ya tenía cuatro jets, contaba con casas en todas las playas que quería y presumía de poseer ranchos en todos los estados del país.

La más lujosa, asegura que tenía un costo de 10 millones de dólares, se encontraba en la costa de Acapulco y tenía varias piscinas así como canchas para practicar tenis, incluso contaba con un yate al que llamó “Chapito”.

No conforme, en la ciudad de Guadalajara, tenía también un rancho con un zoológico incluido, en él había leones, tigres, panteras y venados, por mencionar algunos. Además era un lugar turístico en el que los visitantes ingresaban por medio de un “trenecito”.

“El Gordo” aseguró que siempre se encontraban en diferentes partes del mundo, con el único objetivo de buscar nuevas fuentes de droga. Recorrieron Argentina, Brasil, Japón, toda Europa y Macau, lugar en donde se dirigía el capo para apostar.

Sin olvidar que el poder también le dio mujeres al por mayor, siempre se encontraba rodeado de entre 4 y 5 de ellas. Incluso viajó hasta Suiza para realizarse un tratamiento de células madre con el único fin de lucir más joven.

Joaquín Guzmán también compartía sus ganancias con sus empleados, Miguel Ángel Martínez asegura que en una ocasión “El Chapo” le regaló un reloj Rolex con diamantes y en épocas decembrinas le dio más de 50 coches de alta gama, con un valor de más de 30 mil dólares cada uno.