Contra la crisis, seguro de desempleo

El seguro de desempleo es un instrumento de política pública diseñado para enfrentar crisis económicas. Y es que los beneficiarios de este programa obtienen recursos para comprar productos y pagar servicios a pesar de no tener un empleo. Esto permite que el ciclo económico siga en movimiento. Así lo destacó la Dirección General de Análisis Legislativo del Instituto Belisario Domínguez (IBD) del Senado de la República.

Con el seguro, el trabajador que ha quedado momentáneamente desempleado tiene recursos para su bienestar y el de su familia, así como incentivos y capacitación para encontrar nuevamente un empleo. El financiamiento de este seguro se obtendría de los recursos que aporte obligatoriamente el patrón conforme la Ley del IMSS o la del ISSSTE, que equivale a 3 por ciento del salario del trabajador y los rendimientos que genere, así como del subsidio del gobierno federal con cargo al Presupuesto de Egresos de la Federación. En determinados casos, cuando aún sea insuficiente, el recurso provendrá del gobierno federal mediante el Presupuesto de Egresos de la Federación.

Aunque algunos especialistas aseguran que “hacer uso de su seguro de desempleo implica lesionar su cuenta de ahorro para el retiro por obtener una liquidez inmediata”. Otros opinan que el seguro de desempleo “puede ser contraproducente, ya que si hace uso de su seguro va a tener menos fondos para adquirir su vivienda o tardará mucho más o será menos probable adquirir una casa”.