CONSULTA, UNA VERGÜENZA HISTÓRICA

El 1 de agosto del 2021 pasará a la historia como el día en que México entró a la democracia participativa de una manera vergonzosa,

El 1 de agosto del 2021 pasará a la historia como el día en que México entró a la democracia participativa de una manera vergonzosa, mediante una consulta popular institucional, legal, pero carente de toda seriedad y legitimidad.

La consulta impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, que originalmente estaba destinada a preguntar si la población estaba de acuerdo en llevar a juicio a sus más cercanos antecesores, debió ser rechazada por la Suprema Corte de Justicia de la Nación por inconstitucional.

Pero la Corte, bajo la operación del presidente de la misma, Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, en lugar de invalidad la consulta, modificó la pregunta para quitar toda alusión a personas en específico y lograr así que no fuera violatoria de la Constitución.

Pero el intento de la Corte por quedar bien con el presidente de la República derivó en un mamotreto de pregunta a través de la cual se le consultó a la población si estaba de acuerdo en que se “esclarecieran” “decisiones políticas” tomadas por “actores políticos” de los “años pasados”.

Esa pregunta era tan ambigua que en un eventual “Sí” vinculatorio hubiera llevado a la creación de un sinfín de comisiones de la verdad que abarcaran decisiones no solo tomadas por los ex presidentes de la República, sino por gobernadores, presidentes municipales y diputados de todos los partidos políticos, incluido Morena.

La absurda e inútil consulta fue promovida exclusivamente por Morena con la mentira garrafal de que de su resultado dependería que fueran o no juzgados los  cinco ex presidentes que antecedieron al actual primer mandatario.

Eso no fue lo que se preguntó en la consulta del pasado domingo. No era necesario hacer una consulta para emprender acciones legales en contra de cualquiera de esos cinco ex presidentes.  Y el fracaso de la consulta tampoco significa que ya quedaron exonerados.

A pesar de las mentiras de López Obrador y de Morena, el “pueblo sabio” se dio cuenta de que se trataba de una patraña y le hizo el vacío, al grado de que solo participó el 7.8 por ciento del padrón electoral, cuando se requería un mínimo de 40 por ciento para hacer la consulta vinculatoria.

Es una lástima que tras varios años de postergar la entrada de nuestro país a la democracia participativa mediante los referéndums y las consultas populares, lo hagamos con una consulta “gansito”.

A los ministros de la SCJN les da tanta vergüenza el trabajito que le hicieron al presidente de la República, que ninguno de ellos ha dicho “esta boca es mía” acerca del rotundo fracaso de la consulta del domingo.

OFF THE RECORD

**QUÉ FEO SE LLEVAN EN LA “4-T”

Vaya encontronazo que protagonizaron ayer el coordinador de Morena en el Senado, Ricardo Monreal, y el subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, Alejandro Encinas.

En pleno foro público, Encinas reprochó al Congreso que no se haya incluido en el periodo extraordinario de sesiones el desafuero de los diputados Saúl Huerta y Mauricio Toledo.

Pero Monreal no se quiso quedar con el coscorrón y le exigió al funcionario “respeto al trabajo legislativo”. ¡¡Sopas!!

**AHORA VAN CONTRA EL INE

Lo adelantamos en la entrega del pasado viernes: el presidente López Obrador y los dirigentes de su partido arremeterían en contra de los consejeros del INE, a quienes responsabilizarían del fracaso de la consulta “gansito”.

Veremos hasta donde llega el nuevo golpeteo en contra del árbitro electoral.

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