El líder de la bancada perredista en la Cámara de Diputados, Luis Espinosa Cházaro, reconoció que el choque entre el presidente nacional del PAN, Marko Cortés, y el gobernador de Coahuila, Manolo Jiménez, afecta a la coalición Fuerza y Corazón por México, al evidenciar desacuerdos internos.
Reveló que el PRD muchas veces ha jugado el papel de gozne en los desencuentros entre PAN y PRI, pero en Coahuila faltó tiempo para resolverlo.
Espinosa Cházaro lamentó así el reclamo público de Marko Cortés a Manolo Jiménez por el presunto incumplimiento de los compromisos adquiridos al pactar la coalición por la gubernatura de Coahuila, encabezada por el PRI, a cambio de algunas concesiones para el PAN.
“Bueno, la realidad es que sí afecta a la coalición, porque demuestra una falta de acuerdo. Creo que lo que faltó, más allá de quien esté incumpliendo o no, fue que hubiera un mejor procesamiento por parte del PRI y el PAN”, dijo.
Señaló que el tiempo para superar el diferendo se agotó, aunque lo importante para el bloque opositor es seguir juntos en la mayoría de las candidaturas y en adelante concentrarse en ello.
AIS