Este miércoles, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) redujo su estimación de crecimiento económico para México de 1.7 1.0 por ciento para este 2019, que se suma a otras entidades que han ido bajado las expectativas financieras del país.
Pero el mal augurio monetario continua, porque la misma entidad prevé que el Producto Interno Bruto (PIB) se desacelere, después de haber crecido 2 por ciento en el 2018.
Para la secretaria ejecutiva de la Cepal, Alicia Bárcena, la principal causa de dichos pronósticos fue la incertidumbre que se ha ido generando en la relación comercial con Estados Unidos.
“La desaceleración de la economía mexicana en realidad se inició a mediados del año pasado, se asocia a muchos factores estructurales e históricos como la situación de Pemex, por ejemplo, o la merma de la situación fiscal. Estos son temas realmente estructurales de muchos años”, explicó Bárcena.
