Elementos de la Fiscalía General de Justicia de Baja California catearon el pasado viernes la residencia del exgobernador de dicha entidad, Francisco Vega de Lamadrid, el cual esta ubicada en Tijuana.
Esto como parte de una investigación que se realizan en su contra y de su esposa, Brenda Ruacho, por supuestos desvío de recursos.
En ese sentido, el gobernador de BC, Jaime Bonilla, aseguró que dicho cateo no se trató de una “cacería de brujas” sino de una “búsqueda de justicia”, al argumentar que la esposa de ‘Kiko’ Vega no se presentó a declarar ante la Fiscalía General del Estado (FGE).
“Es un cateo que la Fiscalía consideró prudente, a raíz de la cantidad de información que han tenido. Nosotros lo dijimos durante la campaña, que íbamos a llegar y que íbamos a esclarecer, caiga quien caiga”, expresó Bonilla en su transmisión matutina de este sábado.
Te puede interesar | Agentes de la FGJ catean casa del exgobernador de BC, “Kiko” Vega
Comentó que la investigación se basa en los más de 1 mil 700 millones de pesos en facturas supuestamente falsas que la anterior administración no ha podido justificar, y el cateo se realizó porque ni Vega, ni Ruacho han asistido a las comparecencias a las que los han citado en los últimos meses.
“Las autoridades hicieron lo que tenían que hacer, ir a buscarlos y catear la casa, como un señalamiento grave por los grandes fraudes que hicieron contra todos ustedes, contra el Estado. Entonces, esta situación no es una cacería de brujas”, añadió.
La denuncia la interpuso el gobierno del Estado el pasado 16 de marzo, días después de que la ex primera dama solicitara al DIF la devolución de 1 millón de pesos, presuntamente por una recaudación realizada por una asociación que preside un hijo de ella.
Con información de Milenio y Sin Embargo
