CASTIGO DIVINO PARA IRMA ERÉNDIRA

La forma en que fue destituida como titular de la Secretaría de la Función Pública, demuestra que Irma Eréndira Sandoval Ballesteros recibió un severo castigo por atreverse a desafiar al Supremo.

El presidente Andrés Manuel López Obrador no le perdonó a Irma Eréndira el que cuestionara su decisión de que Félix Salgado Macedonio fuera el candidato de Morena al gobierno de Guerrero, en lugar de Pablo Amílcar Sandoval, hermano de Irma.

Las cúpulas de Morena le atribuyen a los hermanos Sandoval Ballesteros y al esposo de Irma Eréndira, John Ackerman, la campaña negativa en contra de Félix Salgado, que incluyó revivir varias denuncias por violación que el senador tiene pendientes.

Irma Eréndira pagó cara su osadía. No mereció una salida decorosa. El anuncio de su despido ni siquiera ameritó una presentación en público con la cortesía de un reconocimiento a su trabajo, como regularmente ocurre cuando hay cambios en el gabinete.

El presidente simplemente informó que la había despedido mediante un frío tuit para luego ampliar un poco más la información a través de un video, no menos frío que el mensaje de Twitter, en donde ahora sí apareció la servidora de la “4-T” castigada.

La ahora ex titular de la SFP debió dejar el cargo desde hace mucho tiempo, si no por despido, por renuncia. Debió dejarlo por dignidad desde que hizo el gran papel de exonerar al director de la CFE, Manuel Bartlett, de una situación patrimonial inexplicable.

Pero exoneró a Bartlett y ella permaneció en el cargo como si nada. Luego se hizo pública la situación patrimonial irregular de ella, cuando le aparecieron propiedades por 60 millones de pesos cuando había reportado bienes por solo nueve millones.  Tampoco renunció.

Al frente de la SFP, Irma Eréndira Sandoval jugó un papel de tapadera de todas las irregularidades cometidas por personajes de la “4-T”, como la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, el ex súper delegado federal en Jalisco, Carlos Lomelí, o el director general del IMSS, Zoé Robledo.

Pero no fue despedida por eso. Fue echada de una patada del cargo solo por supuestamente orquestar la campaña en contra de Félix Salgado, molesta porque el Supremo de Palacio Nacional no eligió a su hermano como candidato a gobernador.

Las denuncias en contra de Félix no fueron inventadas. Las víctimas existen. Son de carne y hueso. Pero el presidente defendió a capa y espada a su ungido y la campaña de los hermanos Sandoval solo fortaleció más al senador, quien  ahora gobernará Guerrero tras bambalinas.

Irma Eréndira no ocupará ningún otro cargo en el gobierno federal. Tampoco irá a alguna embajada. Al menos no por ahora. No tendrá premio de consolación. Simplemente fue cesada de manera fulminante.

Con este despido anunciado vía Twitter, el presidente López Obrador envió a sus cercanos colaboradores el mensaje de de que durante la segunda mitad de su mandato será inflexible con todo aquel que se atreva a desafiarlo y a cuestionar sus decisiones. Quien viole el principio de la obediencia ciega sufrirá el efecto Irma Eréndira.

OFF THE RECORD

**LAS BARBAS DEL TIGRE

El PVEM acusó a Morena de cometer “fraude” en la elección de presidente municipal de Texcoco, en donde ambos partidos compitieron por separado.

De acuerdo con el PVEM, en esa elección Morena cometió todas las trampas que se conocen, como uso de programas sociales, acarreo, intimidación y compra de votos, entre otras.

Con esta actitud, el PVEM le jala las barbas al tigre, pues Texcoco es la cuna y centro de operaciones del cacique de Morena en la zona oriente del estado de México, Higinio Martínez Miranda.

**AHORA, LOS ALTAVOCES

Lo más notorio del simulacro que hubo ayer con la alerta sísmica es que falló un buen número de altavoces. 

En centenares de colonias la alerta no se escuchó, por lo que muchos ciudadanos se preguntan, con razón, qué hubiera pasado si el sismo hubiera sido real.

¿No será que Claudia Sheiunbaum también ha evitado invertir en el mantenimiento de la alerta sísmica como en el Metro?

[email protected]

twitter:@pepecontreras_m