El candidato de Morena a la presidencia municipal de Nuevo Laredo, Carlos Canturosas Villarreal, está exiliado junto con su familia, presumiblemente en alguna ciudad de Estados Unidos, así lo reveló el dueño de dicha franquicia partidista, Andrés Manuel López Obrador.

Apenas el pasado jueves 5 de abril, en este espacio se publicó información con respecto a las declaraciones del hijo del periodista asesinado, Carlos Domínguez.

A través de una carta dirigida al candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador, Carlos Domínguez hijo, señaló directamente a Canturosas como uno de los personajes involucrados en la muerte de su padre, detallando que su tío, el exalcalde Jorge Alfredo Cantú García ya ha sido vinculado a proceso, junto con otras 6 personas, por estar directamente relacionado con el crimen.

Al tabasqueño poco le importan las advertencias y los hechos.

Es más, tan descaradas las maneras de amnistía al crimen por parte del tres veces candidato presidencial, que la revelación de que Carlos Canturosas está prófugo, huyendo, auto exiliado y perseguido por la PGR, la hizo el propio Andrés Manuel.

El mensaje del aspirante por la Presidencia de la República dejó más dudas que certezas sobre el candidato y ex alcalde de Nuevo Laredo. Pero es sin duda una estrategia de ambos personajes para victimizarse y aludir de nueva cuenta al término “la mafia del poder”.

Existe una real sospecha sobre la presunta autoría intelectual de la muerte del periodista Carlos Domínguez, la cual tiene como soporte al propio hijo del finado comunicador, quien realizaba una investigación acerca de las triquiñuelas hechas por Canturosas.

Lejos de quedarse a enfrentar la denuncia sobre estos hechos, el ex edil prefirió huir y al mismo tiempo refugiarse en el “manto sagrado” del eterno candidato presidencial. El mismo Andrés Manuel López Obrador que ha beatificado a Napoléon Gómez Urrutia, Elba Esther Gordillo, Lino Korrodi y a José Luis Abarca.

Por eso que Canturosas esté bajo sospecha, no debe parecer hacerle ruido alguno al puntero en las encuestas, pues ha perdonado cosas peores y ha prometido amnistía a los narcos. ¿Por qué no al ex alcalde de Nuevo Laredo?

Cabe mencionar que, además de las sospechas sobre la autoría del homicidio en cuestión por parte de los familiares de la víctima, hay que agregar que a estas se suman los señalamientos sobre malos manejos en recursos públicos de cuando fue presidente municipal hace dos años.

En ese sentido, la Auditoría Superior del Estado, tiene investigaciones abiertas y sus cuentas públicas no han sido aprobadas por el Congreso local.

Argumentos menos importantes para el mesías tropical, porque para los de su círculo, todo cuestionamiento a quienes estén en sus simpatías, son estrategias de la “mafia del poder”.