La Auditoría Superior de la Federación (ASF) detectó una opacidad en el destino de los recursos que se destina a la refinería de Dos Bocas.
De acuerdo con los informes de fiscalización de la Cuenta Pública 2020, la filial Pemex Transformación Industrial Infraestructura Desarrollo (PTI-ID), la cual se encarga de la construcción de esta megaobra en el municipio de Paraíso, Tabasco, no cumple ni con los informes trimestrales para dar a conocer una revisión real de la situación financiera y de control del proyecto, ni permite identificar los recursos que en él se gastan.
En una auditoría, se detectaron irregularidades y evidente falta de transparencia, partiendo del hecho que PTI-ID carece de una estructura organizacional en donde pueda identificarse a los responsables directos del proyecto.
Por ejemplo, PTI-ID hizo una aportación de 34 mil 941 millones de pesos para el desarrollo del proyecto de esta refinería conforme a la autorización del Consejo de Administración de Petróleos Mexicanos (Pemex).
Sin embargo, al no tener asignado un importe en inversión física para dicho proyecto, no registró esa cantidad en la cartera como proyecto de infraestructura económica, por lo que carece de los elementos para la evaluación del ejercicio del gasto, así como para medir el grado de avance de la obra, los objetivos y las metas específicos del proyecto estratégico a cargo de la entidad fiscalizada.
Respecto de los pagos por “obras en proceso“, la Auditoría Superior detecto inconsistencias en 113 pagos a siete proveedores, relacionadas con la documentación soporte, “como facturas sin sello o alguna evidencia de su recepción, algunos faltantes en la documentación de las solicitudes de pago, las facturas o notas de crédito y los testigos de pago, por un monto de 978 millones de pesos“.
Con información de Milenio y El Universal
MSA
