La Auditoría Superior de la Federación (ASF) detectó anomalías en la gestión de los recursos asignados al Banco del Bienestar.
En la Segunda Entrega de Informes Individuales del Resultado de la Fiscalización Superior de la Cuenta Pública 2021, el órgano fiscalizador indicó que este proyecto social del gobierno de Andrés Manuel López Obrador debe aclarar el destino y uso de siete millones 610.4 mil pesos y no hay evidencia o sustento que ampare dicho monto.
Entre las observaciones de gastos, la Auditoría Superior indicó que se gastaron por unidad 186.6 miles de pesos y se adquirieron 60 generadores de corriente alterna de 20 kw para las sucursales bancarias, con un pago mayor al del mercado. Un gasto de 64 mil 880 pesos en instalaciones provisionales en 33 sucursales para oficina y almacén, sin acreditar que se hayan construido.
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Además, según la ASF, en la revisión de esas 33 sucursales bancarias se detectaron trabajos pagados no ejecutados por un monto de 149.2 miles de pesos por concepto de suministro y colocación de alambre de púas, suministro y colocación de concertina, que incluye mano de obra y accesorios.
La sucursal en Tlalancaleca, Puebla, también fue señalada. Se advirtió que debería haberse incluido la estructura de cuatro columnas de concreto armado en la fachada principal, mismas que no se ejecutaron, sin que se haya acreditado la no afectación de la seguridad estructural de ese banco.
Otro de los hallazgos refiere que el Banco del Bienestar reportó indebidamente una inversión pagada de 19 millones 881.5 mil pesos, ya que el monto reportado corresponde a 38 bienes del equipamiento de 36 sucursales bancarias distintas a las 115 del proyecto en cuestión.
Con información de Eje Central
MSA
