En este año de elecciones, los aspirantes a cargos de elección popular –desde diputados locales, federales, alcaldes, senadores y “presidenciables”– sacan del “baúl de la historia” a las figuras, frases y demás referencias que recuerdan a los héroes de la patria.
Todos los grandes nombres de la patria salen de nuevo a la luz en el discurso, pero no en los hechos, según acusan varios descendientes de estos personajes.
El pasado 12 de enero, la tataranieta de Benito Juárez; Rosa Elena Sánchez Juárez que no percibe el mismo patriotismo ni amor que tuvo su tatarabuelo por el país, al recordar que fue él quien trabajó para forjar la República.
A pregunta expresa sobre si AMLO –uno de los políticos que en sus discursos evoca la figura del presidente Juárez– tampoco está a la altura del Benemérito, Sánchez Juárez respondió:
“No, ellos toman el legado juarista, su bandera, pero están lejos de alcanzar su estatura política.”
Al referir su desacuerdo con los políticos de la actualidad, opinó que no percibe el patriotismo ni el mismo amor que tuvo el presidente Juárez para el país, al recalcar que gracias a él se restauró y forjó la República, después de la cruenta guerra de reforma y el efímero imperio de Maximiliano.
Además resaltó la falta una figura que evoque los valores de su tatarabuelo:
“Antes que nada Juárez fue patriota, estuvo por encima la patria antes que su propia familia; entonces, sí. Hace falta un Benito Juárez, hace falta alguien con sus ideales”.
Recalcó también la actitud apática y poco participativa que persiste en los mexicanos en relación al interesarse en el mejoramiento de su entorno, así como la actitud de “ver la paja en el ojo ajeno”, y llamó a un cambio de actitud para que mejoren las cosas.
