Y la historia se volvió a repetir, hace exactamente 36 años el presidente, Andrés Manuel López Obrador, renunció a un cargo público, pues consideró que lo “alejaba” de su propósito de mantenerse cercano a la gente.
Corría el mes de agosto de 1983, cuando el entonces gobernador de Tabasco, Enrique González Pedrero, lo nombró Oficial Mayor de la entidad; sin embargo, a pesar de su cercanía con el mandatario local, AMLO declinó casi de inmediato.
Cabe señalar, que ese año López Obrador era dirigente estatal del PRI, pero mantenía diferencias con alcaldes, mismos que por la labor de “contraloría” que realizaba la fuerza política, le pidieron al gobernador que lo sacará del partido.
En consecuencia, el ahora titular del Ejecutivo se mostró en desacuerdo en que el gobernador accediera a las presiones, por lo que 24 horas después de su nombramiento presentó una breve carta de renuncia.
Fue a partir de ese momento, que AMLO rompió relaciones con la administración estatal y abandonó al tricolor, para en 1988 unirse a la Corriente Democrática.
