La tarde de este jueves, el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, anunció a Ariadna Montiel Reyes comofutura subsecretaria de la Secretaría del Bienestar (sustituta de la Secretaría de Desarrollo Social).
Dicho nombramiento generó una avalancha de duras críticas en redes sociales, debido a que Montiel arrastra antecedentes de corrupción que contrastan con el perfil morenista de “honestidad valiente”.
Uno de los principales reclamos por los que Montiel Reyes no merece un lugar en el gabinete de López Obrador, es por su cercanía al “señor de las ligas”, René Bejarano.
Entre 2006 y 2012, Bejarano la impuso como directora de la Red de Transporte de Pasajeros (RTP), uno de los feudos millonarios bajo su control y que genera alrededor de mil millones de pesos al año, mientras que recibe un subsidio de mil 600 millones de pesos anuales.
Además, Ariadna Montiel se desempeñó como diputada de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal en la pasada legislatura, a pesar de ser investigada por un presunto desvío millonario de recursos asentado en la Fiscalía para Servidores Públicos de la Procuraduría General de Justicia capitalina, con número de expediente AP/FSP/B/1345/09-06.
Inclusive, el periodista Adrián Rueda, afirmó que la futura funcionaria de AMLO posee “una verdadera mansión, de las más grandes en la Colonia del Valle” que no coincide con sus ingresos como servidora pública.
