A la 4T de López no le importan las escuelas para discapacitados

Actualmente, 300 CAED en todo el país, junto con sus mil 515 asesores viven con incertidumbre administrativa ya que al no haber una solución pone en riesgo la educación de 20 mil alumnos

Desde su creación durante en el 2009, los Centros de Atención para Estudiantes con Discapacidad (CAED), han padecido diversos descuidos como falta de entrega de recursos para operar, retraso en el pago de salarios a los maestros hasta falta de algún plan de estudios adaptado a los alumnos discapacitados.

Sin embargo, estos problemas continuaron durante la administración de Enrique Peña Nieto y que se volvió en una herencia para el nuevo gobierno encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador.

Actualmente, 300 CAED en todo el país, junto con sus mil 515 asesores viven con incertidumbre administrativa ya que al no haber una solución pone en riesgo la educación de 20 mil alumnos.

Pese a que los CAED pertenecen a la Dirección General de Bachillerato de la Secretaría de Educación Pública (SEP), la misma dependencia no reconoce a los maestros de dichos centros, sino como asesores que son contratados por honorarios, lo que significa que no reciben prestaciones, ni seguro médico y perciben irregularmente lo equivalente al total de dos salarios mínimo mensuales, que con ellos tienen que pagar a un contador para declarar impuestos.

Pese a que los han marchado para solicitar una audiencia con el actual titular de la SEP, Esteban Moctezuma, para tratar dicha problemática, no los han recibido. Además, los maestros denuncian que desde la llegada del nuevo gobierno se volvieron a retrasar los salarios, incluso compensaciones navideñas.