“El silencio también es cómplice”, dijo la madre de un joven desaparecido a Margarita Zavala.
La afectada recriminó a la aspirante presidencial independiente que la desaparición de su hijo fue perpetrada por un policía en 2011, durante la administración de Felipe Calderón (su esposo).
La mujer expresó su indignación por el eufemismo “daños colaterales“, que era usado en exceso durante el sexenio de Calderón para suavizar ante la opinión pública los hechos violentos causados por la llamada “guerra contra el narcotráfico”.
“No son daños colaterales, nosotros les llamamos hijos; desaparecidos, cuando tu marido sacó a las calles a el Ejército y nos dejó en medio de una guerra”, denunció la doliente.
El sentido discurso de la madre, integrante de las Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos en Nuevo León (FUNDNL), dejó sin palabras por varios segundos a la presidenciable, quien le ofreció su solidaridad.