Fiel a su costumbre, el presidente Andrés Manuel López Obrador arremetió de nueva cuenta contra las administraciones anteriores, sus eternos rivales, asegurando que los mexicanos tuvieron “un gobierno mantenido y bueno para nada”.
El mandatario aseguró que los funcionarios públicos percibían sueldos ridículamente excesivos y que ahora, con su política de austeridad, varios de ellos se han visto afectados, pues no quieren perder sus privilegios.
Desde Palacio Nacional, Obrador explicó que poco a poco se irá regulando la situación de aquellos que laboran por medio de honorarios, mismos que han sido de los más afectados por esta cuarta transformación.
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“Estamos escuela por escuela viendo cuántos maestros hay, cuántos son de la Federación, cuántos del Estado, cuántos realmente existen, cuánto ganan, a veces los federales ganan más, pero los estatales tienen hasta 90 días de vacaciones, queremos un sistema único, homologar”.
