Un exceso de Álvarez Icaza meter mano en elección de Ministros

Este viernes, una comisión de senadores se reunió con representantes de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.

Entre los asistentes se encontraban:

  • Rose-Marie Belle Antoine, presidenta de la Comisión.
  • James L. Cavallaro, el Primer Vicepresidente de la CIDH. Y….
  • El secretario Ejecutivo de la Comisión Emilio Álvarez Icaza.

En el encuentro, los senadores y los representantes de la Comisión discutieron el nombramiento de dos ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.

Sobre el tema, los representantes de la Comisión Interamericana llamaron a evitar las cuotas partidistas en el nombramiento de ministros.

En respuesta, el presidente del Senado, Roberto Gil Zuarth, aseguró que no existe ningún tipo de acuerdo que preconfigure la integración en la Suprema Corte. De acuerdo con el legislador, en el Congreso esperarán a que el presidente Enrique Peña envíe sus propuestas y hasta entonces iniciará la discusión.

Seguramente, Roberto Gil tiene razón. Es muy probable que no exista un acuerdo y que la verdadera discusión ocurra una vez que se conozcan las ternas de candidatos a Ministro. No obstante, vale la pena preguntar, ¿qué tiene que decir la Comisión Interamericana de Derechos Humanos sobre la designación de Ministros de la Corte?

¿Qué “pitos toca” la organización que, justo ahora, se encuentra en medio de un escándalo por conflicto de interés debido a la participación de su secretario ejecutivo, Emilio Álvarez Icaza, en asuntos que, por reglamento, no le corresponden..?

En entrevista para La Otra Opinión, el Doctor Vicente Fernández comentó que el llamamiento de la CIDH sería un exceso. A su vez, el académico interpreta la situación como un acto de protagonismo por parte de Álvarez Icaza.

El Doctor Fernández explicó que la Comisión Interamericana sólo actúa por solicitud de un gobierno estatal; a caso concreto. O si lo prefiere, que no tendría por qué involucrarse en cuestiones en las que no se ha pedido su participación u opinión de manera oficial.

Finalmente, el académico reconoció que los mexicanos tienen derecho a ser juzgados por jueces y tribunales autónomos –está reconocido por diversos acuerdos en materia de derechos humanos–, sin embargo, eso no los faculta para opinar o intervenir en la elección de los ministros de la Suprema Corte.

Por otro lado, la senadora perredista Angélica de la Peña –quien estuvo en la reunión con los representantes de la CIDH–, explicó que las cabezas de la Comisión simplemente externaron las preocupaciones que, a su vez, les hicieron saber organizaciones civiles cuyos nombres no reveló.

Y es que, de acuerdo con la legisladora, existen rumores, peticiones y hasta cartas colectivas que alertan del peligro de que los nuevos ministros lleguen a la Corte gracias a una designación a modo.