Este lunes, más de 100 líderes mundiales se comprometieron a poner fin a la deforestación en 2030, así como revertir la degradación de la tierra para fines de la década, todo esto respaldado con un fondo de 19 mil millones de dólares públicos y privados.
Fue en el marco de la Cumbre Climática COP26, desde Glasgow, Escocia, donde los líderes de países como Brasil, Indonesia y la República Democrática del Congo, respaldaron dicha iniciativa, sobre todo porque dichas naciones colectivamente representan el 85 por ciento de los bosques del mundo.
De acuerdo con la oficina del primer ministro de Reino Unido Boris Johnson, en nombre de los demás mandatarios, dicha declaración sobre los bosques y el uso de la tierra cubrirá una zona que abarca más de 13 mil millones de millas cuadradas.
“Tendremos la oportunidad de poner fin a la larga historia de la humanidad como conquistadora de la naturaleza y, en cambio, convertirnos en su custodio”, expresó Johnson, quien aseguró que el acuerdo no tiene precedentes.
Los bosques absorben aproximadamente el 30 por ciento de las emisiones de dióxido de carbono, según la organización sin fines de lucro World Resources Institute. Estos ecosistemas eliminan las emisiones de la atmósfera y evitan que se caliente el clima.
Sin embargo, este amortiguador climático natural está desapareciendo rápidamente. El mundo perdió 258 mil 000 kilómetros cuadrados de bosques en 2020, según la iniciativa de seguimiento de la deforestación de WRI Global Forest Watch. Esa es un área más grande que el Reino Unido.
Ante esta situación, los ambientalistas aseguraron que las comunidades indígenas son las mejores protectoras del bosque, a menudo contra la invasión violenta de madereros y acaparadores de tierras.
Una vez que los líderes mundiales se comprometieron a poner fin a la deforestación en 2030, solo resta esperar que dicha meta se cumpla, pues de lo contrario no se dará paso a la protección y restauración de los bosques.
Con información de Reuters
JZ
