Tal parece que al interior de la Federación Mexicana de Natación (FMN) se ha puesto en práctica la ley mordaza, para todos aquellos clavadistas que se expresen ante los medios de comunicación por la elección de los competidores para los Juegos Panamericanos de Lima 2019.
Dentro de dicha Federación se ha impuesto como “disciplina” que si los deportistas se inconforman por las decisiones de ésta les quitarán las pocas competencias que se les asignaron.
Cabe señalar, que desde que antes de que se llevará a cabo el Control Interno, los clavadistas ya estaban amenazados, y poco pudieron hacer cuando se enteraron que la competencia sería a puerta cerrada, algo que nunca había sucedido y confirmó el acto de opacidad.
Desde que la FMN es dirigida por Kiril Todorov ha reprimido a los atletas que se atreven a denunciar las injusticias, pero consciente a los que forman parte de la “familia”, que son un grupo de atletas representados por Claudia Ruiz, encargada del área de comunicación de la institución.
No está de más señalar, que los atletas castigados ya no competirán en los Panamericanos y corren el riesgo de perder sus plazas para los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
