Cualquier otra persona que hubiera sido detenida por presuntamente abusar de un menor de edad seguiría en los separos de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México o a estas alturas ya habría sido puesto a disposición de un juez penal en algún reclusorio.
Pero eso no ocurrió con el diputado federal de Morena, Benjamín Saúl Huerta Corona, quien se escudó en su fuero constitucional para exigir ser liberado luego de que un menor de edad lo denunció por presunto abuso sexual en su contra en un hotel de la colonia Juárez.
Lo que el menor narra –según el audio que difundió el periodista Ciro Gómez Leyva— es una conducta atroz de parte del diputado federal, que por cierto busca su reelección por el distrito 11 federal, ubicado en el estado de Puebla.
Ante una acusación relacionada con agresiones sexuales se debe actuar con prudencia y cautela, pues siempre existirá la posibilidad de que se trate de una imputación falsa con fines de desprestigio o de extorsión.
En teoría, el menor pudo haber mentido como parte de una estrategia para chantajear y extorsionar al legislador de Morena, como el diputado alegó ante los medios.
Si el diputado abusó o no sexualmente del menor que lo acusa es algo que determinará la FGJCDMX, encabezada, lamentablemente, por una militante del mismo partido que el presunto responsable.
Pero mientras eso ocurre, podemos preguntarnos: ¿Si el diputado es inocente, por qué le suplicó a la mamá del menor llegar a un arreglo económico para que no lo destruyera?
“Llegamos a un acuerdo económico, se lo suplico, se lo voy a pagar con creces, no me destruya”, le dijo el legislador a la madre, de acuerdo con el audio difundido por Gómez Leyva.
Cuando la madre le indica que viajará a la Ciudad de México, el diputado le pide tener un encuentro para solucionar el problema, pero que no sea en alguna delegación, sino en el hotel en el que se hospeda o en cualquier otro lugar. ¿Conciliación en lo oscurito?
Si Saúl Huerta fuera víctima de chantaje, su reacción hubiera sido presentar una denuncia penal. Y al hablar con la madre del menor le hubiera reclamado enérgicamente por su conducta, pero lo que hizo fue tratar de comprar con dinero el silencio de la señora para, en sus propias palabras, no verse destruido.
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La carpeta de investigación por presunto abuso sexual quedó abierta en la Fiscalía capitalina, la cual, en caso de encontrar elementos inculpatorios en contra del diputado de Morena, deberá solicitar su desafuero.
Mientras se lleva a cabo la indagatoria el legislador permanecerá en libertad y continuará, como si nada, con su campaña proselitista en busca de su reelección como diputado federal.
Por la gravedad de las acusaciones que enfrenta y por el alto grado de verosimilitud que hay en ellas, el diputado Saúl Huerta debería desistir de buscar su reelección, que le extendería el fuero por otros tres años.
Si él no renuncia voluntariamente a la candidatura, Morena debería quitársela. A menos que el partido en el poder decida proteger políticamente a otro aspirante a cargo de elección popular presuntamente involucrado en agresiones sexuales.
OFF THE RECORD
**CANDIDATA DE DIOS
La candidata del PES al gobierno de Zacatecas, Guadalupe Medina Padilla, no negó la cruz de su parroquia al afirmar que su nominación es “un llamado de dios”.
A Guadalupe, formada en las filas del PAN, no le importó –o quizá no lo sabe—que vivimos en un Estado laico, en donde no se mezclan los asuntos públicos con las cuestiones religiosas.
Para fortuna de todos, Guadalupe está muuuuuy lejos de ganar la gubernatura, por mucho que le ruegue a dios.
**OSO INTERNACIONAL
El presidente Andrés Manuel López Obrador hizo el gran oso internacional al preferir su mañanera a estar en la Cumbre Climática.
Con su absurda actitud, nuestro presidente se ganó no solo las críticas sino las burlas de periodistas, jefes de Estado, especialistas y líderes de organizaciones sociales.
Correo: [email protected]
Twitter: @pepecontreras_m
