Todo indica que Dilma se va

Tras la aprobación del juicio político por parte de la Cámara Alta brasileña en contra de la mandataria con licencia, Dilma Rousseff, sólo queda esperar que concluya el mes para saber si la destitución se hará de manera definitiva, o temporal, como se manejó cuando la entonces presidenta fue suspendida de su cargo por ser presuntamente responsable de manipular cuentas públicas.

De acuerdo con especialistas, son pocas las oportunidades que tiene Rousseff para salir bien librada, ya que para la votación final sólo se requiere de una mayoría calificada de 54 votos.

En entrevista para La Otra Opinión, el Dr. Mario Torrico, investigador de Flacso, comentó Dilma está –prácticamente– con los dos pies fuera del gobierno de Brasil.

El especialista agregó que ésta no pisaría la cárcel debido a que su juicio es de clase político.

En caso de que Rousseff sea destituida, el ex vicepresidente de su mandato, Michel Temer –quien actualmente ocupa su cargo– quedará hasta 2018 como presidente de Brasil.

“A pesar de que los Juegos Olímpicos han calmado un poco las aguas, el panorama no es muy prometedor. Los índices de aprobación muestran que la gente no quiere que Temer se quede en el poder, hay un desgaste en la clase política que causa conflictos sociales. Brasil no estaba preparado para la austeridad ni la crisi” resaltó Torrico.

Para finalizar, el entrevistado señaló que el futuro de los cariocas pinta difícil con el paso de los días, y es que la polarización para las próximas elecciones, aunada a la crisis económica y a los numeroso rojos que trajó el caso Petrobras indican que no hay una solución pronta.

“Cuando la economía va mal, cualquier escándalo, por más pequeño que sea, explota con fuerza”, concluyó Torrico.