A propósito de frenar la insistencia del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación para restituir a Rosa Pérez Pérez como presidenta municipal de Chenalhó, Chiapas, habitantes de la comunidad explicaron que la razón de su destitución fue por qué era ineficiente. Además amenazaron con actuar de forma violenta en caso de haber imposición.
Cabe recordar que la alcaldesa fue obligada con violencia y ante el secuestro de dos de sus legisladores y un gran número de bloqueos carreteros en la zona, a entregar el cargo en mayo de este año a Miguel Santiz Alvarez, hombre que cuenta con el respaldo de 82 comunidades de la localidad.
Los habitantes de la zona han comentado en repetidas ocasiones que por sus prácticas tradicionales pueden revocar y sustituir al mandato local y que por esas mismas costumbres una mujer no puede llegar a gobernar.
Lo extraño de la situación es que la presidenta del Partido Verde Ecologista de México ganó limpiamente las elecciones el 19 de julio de 2015, con un total de ocho mil 332 votos a favor, y ahora, a seis meses de los hechos, los habitantes hablan de una falta de sensibilidad hacia el pueblo indígena.
Por esta razón, en La Otra Opinión nos preguntamos: ¿por qué votaron por ella desde un principio? ¿acaso no notaron esas inconsistencias en su campaña?
