Secuestro de criminales en Puerto Vallarta, ¿No es grave?

La madrugada de este lunes se creó una gran alarma en Puerto Vallarta, Jalisco, cuando se dio a conocer que al menos seis personas fueron secuestradas en “La Leche”, un lujoso restaurante de la zona turística.

Aunque muchos actores consignaron los hechos, las autoridades del estado informaron que entre los secuestrados había criminales y que en este grupo se encuentra Jesús Alfredo Guzmán Salazar, hijo del narcotraficante Joaquín “El Chapo” Guzmán. Se sabe además que entre los secuestrados estarían algunos empresarios de la zona.

Si bien algunos funcionarios se han querido lavar las manos diciendo que eran criminales los secuestrados— y que se trataba de un arreglo entre grupos delictivos—, el hecho es igual de grave que si fueran civiles; o quizá más grave.

Eduardo Almaguer, fiscal de Jalisco, declaró que por los indicios encontrados en los vehículos de las víctimas, se estableció la presunción clara “de que pertenecen a un grupo delictivo”, aunque no precisó el nombre de la organización.  

Pero se sabe además que a las afueras de “La Leche” había sujetos armados…¿Y las autoridades?

Así, los criminales nos demuestran que ellos mandan en estas ciudades.

Y surgen más dudas: Si eran criminales ¿Por qué no los habían agarrado? ¿A los secuestrados los vana perseguir? ¿Cuál será el trato que reciban?

Asimismo, Aristóteles Sandoval, gobernador de Jalisco, garantizó calma a los ciudadanos de Puerto Vallarta pero es sabido que cuando un capo de gran peso cae —como el hijo del “Chapo”—los grupos delictivos combaten.