Este domingo, Andrés Manuel López Obrador convocó a una mega marcha en apoyo a la CNTE. En días pasados, en Nochixtlán, Oaxaca; se dio un enfrentamiento entre supuestos docentes y las fuerzas de seguridad. La movilización de Obrador fue, supuestamente, para protestar por lo ocurrido en Oaxaca.
Aunque a la marcha –que partió del Ángel de la Independencia–, asistieron alrededor de 17 mil “solovinos”; se sabe que muchos de ellos fueron acarreados en camiones provenientes de varias entidades de la República como Chiapas, Tabasco, Chimalhuacán, Chalco y Ciudad Nezahualcóyotl.
Frente a esta realidad –que incluye unos 800 autobuses de todo el país–, la pregunta obligada es, ¿quién financia las marchas de López Obrador? ¿quién facilita todo para que miles asistan a la Ciudad de México a mostrar su “apoyo a los maestros de la CNTE”? ¿de quién son los medios de transporte en el que llegan los “solovinos”?
Los ingenuos dirán que las marchas –al igual que el sueldo de López Obrador–, salen de las aportaciones voluntarias que hacen los militantes de Morena –o de la fundación Honestidad Valiente–; incluso habrá quien asegure que todo se pagó con recursos de los maestros de la CNTE; o con la venta de libros revolucionarios; o del bolsillo de los líderes de la Coordinadora –que por cierto cobran muy bien–; o del pase de charola en las tertulias que organizan los intelectuales cercanos al líder de Morena.
Habrá otros, sin embargo, que crean que la marcha de López Obrador se financió por grupos ligados a las guerrillas y que son los que, en este momento, se encuentran detrás de la CNTE.
¿Usted a quién le cree?
