¿Por qué ocultó información el GIEI?

El viernes se publicó en Reforma “que las conclusiones del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes, GIEI, para el caso Ayotzinapa respecto a que no hubo incendio en el basurero de Cocula los días 26 y 27 de septiembre de 2014, se basan en dos reportes elaborados por la UNAM, a solicitud de la Procuraduría General de la República”.

La nota informa que ambos estudios fueron elaborados por el Centro de Ciencias de la Atmósfera, CCA, y el Instituto de Geología de la UNAM. Desde la primera semana de octubre, señala la información, estos documentos forman parte del tomo 151 de la averiguación previa AP/SDHPDSC/01/001/2015.

Cito al periódico. “Los informes contienen evidencia científica para refutar la ‘verdad histórica’ del ex procurador Jesús Murillo Karam, quien aseguró que los estudiantes normalistas fueron incinerados en el basurero de Cocula”.

Dicha evidencia científica estaría apoyada no solo en respetables institutos de la máxima casa de estudios de México: contaría incluso con datos de “las estaciones climatológicas y meteorológicas del Servicio Meteorológico Nacional, el pronóstico numérico operativo del CCA y la precipitación estimada mediante satélite e imágenes de infrarrojo del satélite GOES”. Todas estas fuentes habrían brindado información a partir de la cual sería posible concluir “que sí llovió en Iguala el 26 y 27 septiembre de 2014 y que no se detectó incendio en la población de Cocula durante los mismos días”.

La nota dice que para elaborar este reporte, el CCA se apoyó en información de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos, NOAA (por sus siglas en inglés), y la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad, Conabio.

La información indica, pues, que la PGR mintió, y además escondió sus propios informes: indica que aunque hay un registro de incendio en Guerrero en esas fechas, este incendio no corresponde a las coordenadas de Cocula, en donde según la “verdad histórica” de Murillo Karam fueron incinerados los estudiantes.

Esta columna tuvo acceso al estudio. Hay que recordar que el GIEI solo lo citó, no lo presentó físicamente.

Pues bien, el GIEI dice la verdad. La PGR pidió al CCA un informe sobre “las condiciones climatológicas y ambientales registradas los días 26 y 27 de septiembre en los municipios de Iguala y Cocula”.

El CCA respondió con un informe de 16 páginas firmado por la doctora Telma Gloria Castro, y fechado el 1 de octubre de 2015.

A partir de este punto, el GIEI ya no dice tanto la verdad.

Olvidó decirnos, por ejemplo, que la primera conclusión de los respetables institutos de la UNAM que dicho grupo de expertos citó fue que, aunque efectivamente la estación meteorológica de Iguala registró un evento de lluvia el 26 de septiembre, “con una precipitación acumulada de 16.5 mm entre las 4:20 y las 6:00 horas tiempo local, y otro evento con una precipitación acumulada de 5.3 mm entre las 23:40 horas del día 26 y las 4:40 horas del día 27 del tiempo local, NO se consiguieron observaciones de precipitación en Cocula, Gro.”

Esto es una “prueba científica” de que la UNAM dijo que “no se consiguieron observaciones de lluvia en Cocula” en esos días.

En la página 13, el informe señala: “Puede ocurrir que algún incendio no sea detectado cuando es muy pequeño o de bajas temperaturas, también no puede detectarse por cobertura de nubes, humo denso o una cubierta densa de árboles. Asimismo puede suceder que un incendio ocurra entre los pasos del satélite y no sea detectado”.

Eso dice el informe la UNAM, que la vocería del GIEI dio a conocer, inexplicablemente, de manera parcial.

Creo que debemos al grupo de expertos una versión de lo que ocurrió en Iguala, que de otro modo no estaría a nuestra disposición.

No sé qué pensar ahora. No sé por qué un mismo informe puede tener un abanico ambiguo de interpretaciones. Deberíamos exigir que lo explique la PGR, deberíamos exigir que lo explique el GIEI.

Ahí están los documentos.

Por último, consultado por el columnista, el director general de Geomática de la Conabio, Rainer Andreas Ressl, respondió: “No se puede concluir si hubo incendio o no. Un satélite óptico no puede ver a través de nubes. En los días en cuestión hubo muchas nubes en toda la zona, por ello no se registró un punto de calor en la zona de Cocula. Eso no significa que no pudo haber existido un incendio, simplemente el satélite no registró nada por las nubes”.

@hdemauleon


TOMADO DE EL UNIVERSAL