PAN y PRD, con pleitos pavimentan triunfo del PRI

Por definición, la oposición mexicana –el PAN y el PRD– surgieron para echar al PRI del poder presidencial.

Sin embargo, en este momento, hay estados donde las peleas no son entre el tricolor y otros partidos. En realidad, buena parte de los pleitos del proceso electoral son al interior de la misma oposición. Por ejemplo:

Uno. En Sinaloa se perfilaba un bloque de oposición entre el PAN, el PRD y el Partido Sinaloense. No obstante, los perredistas abandonaron el acuerdo cuando los panistas negaron el apoyo a sus propuestas. Semanas después, el PAS de Héctor Melesio Cuén también se levantó de la mesa de negociación.

Dos. En Tlaxcala, la necedad de dos senadoras —la panista Adriana Dávila y la perredista Lorena Cuéllar—, también frustró una alianza de oposición. En consecuencia, PAN y PRD irán por separado. En un extremo, la senadora Dávila parece ir con un apoyo bastante diezmado; en el otro, la perredista Lorena Cuéllar tendría detrás el aparato del gobernador poblano, Rafael Moreno Valle.

Tres. En Puebla los perredistas echaron abajo la alianza con el PAN pues, dijeron, el gobernador Moreno Valle trató de imponer a su candidato. En este momento, es probable que el PRD no postule un candidato.

Cuatro. En Zacatecas, los perredistas están hechos bolas. El 14 de febrero, los amarillos eligieron a Rafael Flores como su candidato a gobernador. Tres días después, dos de los precandidatos —Pedro de León Mojarro y José Narro Céspedes—, impugnaron el nombramiento pues, dijeron, Flores había rebasado el tope de campaña y abusó del tiempo en medios. El 18 de febrero, el CEN del PRD anuló la candidatura de Flores y la entregaron a de León Mojarro. Sin embargo, este martes 1 de marzo, el Tribunal electoral Zacatecano rechazó la impugnación en contra de Rafael Flores y le devolvió la candidatura. Curiosamente, tanto Flores como de León Mojarro aseguran que son los candidatos del PRD en aquella entidad.

Y cinco. En Oaxaca, un sector del perredismo —cercano al CEN del partido—, podría dejar solo al candidato de alianza, José Antonio Estefan Garfias. Y es que, según las encuestas, el político mejor posicionado era el senador Benjamín Robles. Sin embargo, el gobernador Gabino Cué —y el ex gobernador Diódoro Carrasco—, impusieron a Estefan Garfias y habrían provocado la atomización de la izquierda.

¿Así es como la oposición piensa derrotar al PRI?