Motín en tierra del Bronco viajero

En este espacio hemos cuestionado con severidad las incongruencias de Jaime Rodríguez, el gobernador bronco de Nuevo León.

Hemos dicho que mientras “El Bronco” advirtió que uno de los requisitos para trabajar con él era comprender que el servicio público es un empleo de 24 horas, en realidad la pasa viajando.

En lo que va de su corta gestión –lleva cuatro meses en el cargo–, el neolonés ha visitado Tabasco, Baja California, Guadalajara, Tamaulipas, Estado de México y San Luis Potosí, entre otras entidades.

Según se sabe, el mandatario local acude a ferias de libros –a presentar su texto sobre los gobiernos independientes– y a conferencias a propósito de su victoria electoral el pasado 7 de junio.

Cuando un reportero preguntó al Bronco por qué viajaba tanto, el gobernador olvidó el primer requisito para colaborar en el gobierno de Nuevo León, olvidó la advertencia que hizo a su equipo y olvidó que dijo que el gobierno es un empleo de tiempo completo. Y es que a la pregunta, Rodríguez contestó: “Necesito viajar, compadre, tengo familia, tengo experiencias que ver, no tengo que estar 24 horas ahí en el Palacio, no me lo exige la ciudadanía”.

En este contexto, en el territorio de un gobernador que parece más interesado en apuntalar su candidatura presidencial que en gobernar, esta madrugada se registró un motín en el penal de Topo Chico.

Para estas alturas, todo el mundo sabe que el incidente dejó 52 muertos y una docena de heridos. También todo el mundo sabe que atrás de la riña se encuentran dos grupos criminales antagónicos que estarían vinculados con el cártel de los Zetas. Y todo el mundo sabe que el gobernador Rodríguez ofreció un mensaje a medios y aseguró que lo ocurrido en Topo Chico es la consecuencia del cochinero que existe en el sistema penitenciario nacional.

No obstante, lo que pocos saben –al menos con certeza–, es cómo afectaron las ausencias del gobernador en lo ocurrido esta madrugada. En efecto, todo gobierno cuenta con funcionarios responsables de atender las diferentes áreas que componen el servicio público; no obstante, llama la atención que el motín ocurra en un estado donde el gobernador parece más preocupado en promover su imagen que en hacer su trabajo.

¿Será que el gobernador bronco de Nuevo León entenderá el mensaje? ¿será que luego de este incidente, el Bronco entenderá que su trabajo es gobernar Nuevo León y no adelantar su campaña presidencial? ¿será que, ahora sí, Jaime Rodríguez hará aquello para lo que fue electo?