Morena hace “vaquita” para financiar bloqueos de la CNTE

En esta ocasión presentamos una imagen que, en realidad, es una perla.

En primer plano se observan aguas embotelladas, cobijas, latas de atún y cajas llenas con productos básicos.

Al fondo, en segundo plano, se distingue a la legisladora Citlalli Hernández, diputada por Morena a la Asamblea Legislativa de la Ciudad de México.

La fotografía es de ayer, lunes. Retrata el momento en que la diputada de Morena anunció que cada uno de los 20 integrantes de su bancada donó 5 mil pesos para enviar víveres a la disidencia magisterial de Oaxaca.

Es decir, que la bancada de Morena en la Asamblea Legislativa sumó esfuerzos para mantener los plantones y bloqueos que tienen al centro de Oaxaca –y a sus destinos turísticos– al borde de la quiebra.

Más aún, los diputados de Morena juntaron 100 mil pesos para apoyar a “los maestros” pero no movieron un dedo para asegurar que la mayoría –los niños–, reciban la educación que, por obligación, les corresponde.

Acaso lo más grave es que a la ocurrencia de los diputados capitalinos se sumaron personajes de la talla de Alejandro Encinas, Layda Sansores y Manuel Bartlett; todos ellos, senadores del PRD, del PT o del Movimiento Ciudadano; quienes garantizaron al magisterio disidente que trabajarán para abrogar la reforma que ellos mismos aprobaron hace un par de años.

¿Quiere más?

El frente de oposición que se abrió en el Congreso, nace el mismo día que la secretaría de Gobernación –luego de semanas de “diálogos”–, finalmente acordó tres mesas de negociación con la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, la CNTE.

Es decir, que mientras el Ejecutivo apaga un fuego… el legislativo aviva otro.

Por cierto, cosa curiosa, en las mesas de diálogo planteadas por Segob, la primera atenderá asuntos políticos, la segunda temas educativos y la tercera se enfocará en la crisis social.

En otras palabras, las prioridades de la CNTE son evidentes.