Más y más mentiras de Aristegui

Siguen las mentiras y los mentirosos en torno a Carmen Aristegui.

El pasado viernes, aquí documentamos la falsedad y la manipulación mentirosa del supuesto reportaje de la conductora Aristegui, quien acusó sin pruebas al ex líder del PRI-DF, Cuauhtémoc Gutiérrez, de presunto tráfico sexual con dinero público.

Y es que todas las autoridades calificaron de “infundado” el “reportaje”.

Y, como es común, manos amigas de la conductora movieron cientos de “bots” con insultos y amenazas. Algunos, incluso alardeaban una declaración de la ONU, en defensa de la conductora y contra la empresa MVS, por la violación de los derechos humanos de Aristegui, al ser despedida.

Por eso, buscamos “la fuente” de la información y ratificamos que –igual que parte de la prensa mexicana e igual que Aristegui–, voces de la ONU se basan en dichos y no en hechos. ¿Por qué?

Porque cuando hicinos el trabajo periodístico elemental de revisar –palabra por palabra–, de las nueve cuartillas del Informe Preliminar del Grupo de Trabajo de las Naciones Unidas sobre Empresas y Derechos Humanos, descubrimos que el presidente de dicho Grupo, Pavel Sulyandziga, no sólo engañó a los mexicanos y a la prensa, sino que exhibió una grosera parcialidad sin pruebas.

Es decir, en conferencia de prensa, Pavel afirmó que se produjo “una grave violación de los derechos humanos por parte de la empresa” –no citó a MVS–, que despidió a Aristegui en 2015.

Sin embargo, el informe preliminar de la ONU nunca habla del caso de Aristegui, a quien tampoco menciona en ninguna de sus nueve cuartillas. Y, en las pocas líneas que “los expertos” hacen referencia al tema de los derechos de comunicadores, sólo afirman que en su visita a México encontraron “pruebas de censura y sanción contra periodistas de investigación que han expuesto conflictor de interés y corrupción”.

¿Cuáles periodistas, cuáles casos, cuáles conflictos de interés y cuál corrupción? Nunca lo dice el informe.

Pero se vuelve “una chacota” –indigna de la ONU–, cuando a pregunta expresa a directivos de MVS, confirmaron que ni la ONU ni otra instancia de derechos humanos, los buscó para escuchar su versión sobre el despido de la señora Aristegui y menos para entregar las pruebas.

Peor, cuando MVS se enteró que la ONU indagaba sobre el caso, trató de contactar a la representación en México de Naciones Unidas y nadie les hizo caso. Por eso la pregunta. ¿Es serio el trabajo de la ONU?

Más y más mentiras de Carmen Aristegui. Y hoy exhibe a la ONU como institución mentirosa.

Al tiempo.