La relación con México ha sido uno de los temas más debatidos por los candidatos a la presidencia en Estados Unidos, Hillary Clinton y Donald Trump. Y ante la postura xenófoba del candidato republicano, para algunos, lo más conveniente sería la victoria de la demócrata.
Ante tal escenario, aquí en nuestro país, la postura del Gobierno debe de ser prudente… mientras que algunos con miras al 2018 ya comienzan a medir las aguas en el país vecino. Unos de esos tantos son los panistas— y aspirantes a la presidencia de la República por el PAN—Margarita Zavala y Ricardo Anaya.
Este fin de semana, Zavala y Anaya tomaron el escenario de las postulaciones presidenciales en Estados Unidos para montar su propia obra en torno a las aspiraciones de cada uno rumbo al 2018. El jueves, la exprimera dama subió a su cuenta de Twitter una fotografía apoyando a Hillary Clinton desde la Convención del Partido Demócrata en Filadelfia; mientras que el domingo, el presidente nacional del PAN publicó un comunicado de prensa en el que afirmó –como si hiciera falta decirlo– que Acción Nacional respetará la decisión del pueblo estadounidense, pero también estará muy atento a los resultados electorales en Estados Unidos.
Así, los dos principales aspirantes a la candidatura del partido blanquiazul aprovechan la coyuntura para mostrar sus cartas.
Anaya abrió su comunicado diciendo que el PAN se prepara para asumir la presidencia en 2018 pero no aclaró es que él mismo espera ser quien se siente en la silla presidencial—o al menos ser el candidato—.
Anaya también aprovechó para lanzar propuestas de campaña disfrazadas de planteamientos partidistas: construcción de una agenda bilateral con Estados Unidos basada en los derechos humanos, respeto a los tratados internacionales suscritos y participación activa en la comunidad internacional.Asimismo, exigió a Clinton y Trump que se dirijan con respeto a México y a los mexicanos, sin embargo calificó el discurso del republicano como “aberrante”.
Tal parece que, así como Trump utiliza a los migrantes para “enganchar” al público estadounidense con su plataforma electoral, el panista “se colgó” del polémico magnate para pronunciarse ante los medios.
Y es que así como están las cosas, pareciera ser que Ricardo Anaya está celoso porque mientras a Margarita Zavala la invitaron al Congreso demócrata, el dirigente se quedó con las ganas.
Por su lado, Margarita Zavala afirmó este lunes en un texto publicado por un diario, que la elección en Estados Unidos también es “acerca de nosotros, los mexicanos”. Se refirió al discurso “deshumanizante y humillante” de Trump e invitó a reconocer que si gana uno u otro de los candidatos, las consecuencias para México serían muy diferentes.
Pero la contienda electoral en Estados Unidos tiene otra arista para Zavala. La exprimera dama se pronuncia abiertamente a favor de Clinton no sólo porque su actitud hacia México es más congruente; también lo hace porque así conviene a sus intereses por ocupar la silla presidencial.
Zavala –citando a Clinton–, dijo que “cuando una barrera cae en cualquier lado, eso le abre el camino a todos”. Si al tirar la barrera de los estereotipos de género se abren las puertas de la Casa Blanca para Hillary Clinton, las de Los Pinos podrían abrirse para Margarita.
Así, mientras llegan las elecciones en Estados Unidos, los aspirantes a la candidatura panista ya juegan sus cartas y “se suben al barco” estadounidense para posicionar su imagen ante la militancia y el electorado. ¿A quién favorecerá más el debate?¿Quién saldrá más fortalecido de la coyuntura?
