Margarita va a la convención demócrata y se apunta en la lista

Angela Merkel en Alemania, Theresa May en Reino Unido, Cristina Fernández de Kirchner, en Argentina, Michelle Bachelet en Chile y Dilma Rousseff en Brasil son sólo algunas de las mujeres que han llevado las riendas de sus países en años recientes. Ahora, tras la nominación de Hillary Clinton como candidata del Partido Demócrata, la posibilidad de que la presidencia de Estados Unidos sea ocupada por una mujer parece más cercana que nunca. ¿Pasará lo mismo en México? ¿Llegará pronto una mujer al poder?

A dos años de las próximas elecciones presidenciales en México, Margarita Zavala luce como la única mujer con posibilidades reales de llegar a Los Pinos en 2018. Eso sí, la exprimera dama tendría que superar a Ricardo Anaya en una contienda interna en el PAN.

En medio de esta disputa, este jueves, Zavala asistió como invitada a la Convención del Partido Demócrata en Filadelfia para brindar su apoyo a Hillary Clinton.

Además de un acercamiento político a la hipotética mandataria estadounidense, Zavala podría verse beneficiada por una probable transformación en el imaginario colectivo acerca de la mujer en la política. Así como marca tendencia en cuestiones culturales, Estados Unidos es un referente al que México voltea constantemente en asuntos políticos. Por ello, la llegada de Clinton a la Casa Blanca podría hacer que los partidos y la ciudadanía mexicana vean con buenos ojos la posibilidad de tener una mujer en Los Pinos.

El paralelismo entre Clinton y Zavala es evidente.  Sin embargo, la forma en que se mira a cada una en su respectivo contexto es muy distinta. Si bien la carrera política de Clinton es más prominente, la diferencia radica más bien en la concepción que se tiene del papel de las mujeres en la política en México y en Estados Unidos. Por ejemplo, aunque ambas fueron –en su momento– primeras damas, en México Vicente Fox y otros personajes acusan que Zavala es una especie de títere que Calderón maneja a su antojo para regresar al poder. En contraste, Clinton es reconocida como una de las figuras más importantes del Partido Demócrata, y nadie cuestiona que Bill Clinton la esté manipulando.

El hecho es que, poco a poco, las mujeres van ganando espacios en la política. Si Margarita Zavala quiere apuntarse en la lista, deberá demostrar a quienes la cuestionan –primero en la contienda por la candidatura panista– todas sus habilidades políticas y lidiar con los estereotipos de género de un país especialmente machista. No es tarea fácil, pero como han mostrado muchas mujeres en todo el mundo, tampoco es imposible.