Los culpables de la crisis de Oaxaca

Todos saben que Oaxaca está en crisis; que está sitiada, que está bloqueada, y que abunda la pobreza… pero nadie quiere reconocer quiénes son los culpables de esta situación. Aunque los responsables tienen nombre, apellido y color de partido político, nadie los señala.

A los ojos de la opinión pública, los problemas en el estado se incrementaron durante el gobierno del priista Ulises Ruiz, quien estuvo en el cargo entre 2004 y 2010. Y la cosa no mejoró con Gabino Cué, actual gobernador de Oaxaca por la alianza PAN-PRD.

Pero la lista no termina aquí.

Políticos de todos los partidos parecen haber olvidado que apoyaron y operaron para que Gabino Cué se convirtiera en gobernador. ¿De quiénes hablamos?

PAN

En el PAN, César Nava fue dirigente de agosto de 2009 a diciembre de 2010, es decir, él hizo candidato a Cué. A Nava lo sucedió Gustavo Madero –de 2010 a 2015–; y actualmente el cargo es Ricardo Anaya. Todos ellos comparten responsabilidad por el fracaso de Gabino.

PRD

En el PRD, Jesús Ortega fue dirigente del 2008 al 2011; después Jesús Zambrano, de 2011 a 2014; luego Carlos Navarrete, de octubre de 2014 a noviembre de 2015; y finalmente Agustín Basave, quien acaba de renunciar. En los hombros de todos ellos pesa la responsabilidad política de la tragedia oaxaqueña.

Convergencia (Hoy Movimiento Ciudadano)

Luis Walton dirigió al partido naranja de 2011 a 2012; luego Luis Maldonado y actualmente Dante Delgado, ahora de Movimiento Ciudadano desde 2012. Todos ellos gobiernan Oaxaca por la vía de Gabino Cué.

PT

Alberto Anaya sigue siendo hasta ahora el presidente colegiado del partido, cargo que ocupa desde 1990.

Y la lista sigue

Andrés Manuel López Obrador apoyó a Gabino en su campaña para gobernador. Hoy lo recrimina. Pero eso no lo hace menos responsable.

El experredista Cuahtémoc Cárdenas, quien hoy está sin partido político, también empujó a Gabino.

Y otros que son parte de la actual situación oaxaqueña son:

El exgobernador panista de Guanajuato, Juan Manuel Oliva Ramírez; el gobernador electo de Durango José Rosas Aispuro y el fallecido Manuel Camacho Solís, coordinador de Diálogo por la Reconstrucción de México. Todos ellos asistieron al ungimiento de Gabino como candidato de alianza. Hoy, la responsabilidad de su fracaso se reparte entre todos.

Finalmente, el declive de Oaxaca también está en manos de quienes aplaudieron el triunfo de Gabino en su toma de protesta –el 1 de diciembre de 2010–; nos referimos a siete gobernadores y al entonces jefe de gobierno, Marcelo Ebrard; al entonces senador Carlos Navarrete y a la entonces diputada panista, Josefina Vázquez Mota.

¿Y quién sanciona a los otros responsables del fracaso en Oaxaca? ¿acaso a nadie importa?