Durante el tercer y último debate entre los candidatos a la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump dejó entreabierta la posibilidad de desconocer los resultados de las elecciones del próximo 8 de noviembre. A pregunta expresa del moderador, el republicano contestó: “Lo veré en su momento, pero lo que he visto hasta ahora es muy malo”, acusando un posible amaño en su contra y a favor de Hillary Clinton.
Aunque en México estamos acostumbrados, por cortesía de Andrés Manuel López Obrador, a declaraciones de este tipo, en Estados Unidos —país insignia de la democracia— es la primera vez que un candidato presidencial pone en duda a las instituciones.
Ya desde la semana pasada, cuando el peso de sus escándalos sexuales, sus declaraciones machistas, la pérdida de apoyo de su partido y las derrotas en los primeros dos debates hizo mella en su popularidad, Trump dejó entrever que su última carta podría ser victimizarse y alegar una conspiración en su contra.
Y ahora, al poner en entredicho la legitimidad de las elecciones, el magnate deja ver a todo el mundo su faceta más antidemocrática. Y a México en particular, le recuerda que tiene en casa a un personaje de la misma naturaleza: Andrés Manuel López Obrador.
Y es que son muchos quienes han comparado al tabasqueños con el neoyorquino: Margarita Zavala, Vicente Fox y Jesús Ortega, entre otros. Por su parte, López Obrador ha intentado desmarcarse de la imagen de Trump y afirma que la comparación está orquestada por Carlos Salinas de Gortari, Felipe Calderón y Claudio X. González. Sin embargo, el propio tabasqueño no se ayuda a sí mismo. Aquí 10 similitudes entre ambos:
- Antes de las dos elecciones en que participó como candidato presidencial —tanto en 2006 como en 2012— López Obrador alegó un fraude en favor de sus rivales con el fin de “abrir el paraguas” ante una eventual derrota y crear incertidumbre entre sus seguidores. Hoy Trump recurre a la misma estrategia.
- Ambos personajes han sido criticados por descalificar a las instituciones. En México, muchos se han cansado de decir que “López Obrador no cree en la democracia y en las instituciones. En el debate de anoche, Clinton reprochó a Trump que con su negativa a aceptar una derrota “está denigrando la democracia.
- Tanto Trump como López Obrador encuentran en los medios de comunicación un chivo expiatorio. Así como el tabasqueño acusó una campaña de Televisa en su contra, el neoyorquino denuncia a los “medios corruptos” como el New York Times por “difamarlo”.
- En su discurso, Trump y López Obrador se encargan de pintar un panorama caótico: pobreza, desempleo, inseguridad… y aseguran que con su llegada a la presidencia, todo se arreglará.
- Más allá de las proponer soluciones, Trump y López Obrador se encargan de señalar culpables: uno a los migrantes; otro, a “la mafia del poder”.
- Ninguno de los dos es capaz de reconocer a sus rivales como oponentes dignos y los tachan como lo peor del mundo: anoche, Trump dijo que Clinton es “repugnante”; por su parte, López Obrador califica a sus detractores como “corruptos”.
- Los dos emplean un discurso nacionalista y rehuyen a la relación con el extranjero. Así como Trump propone renegociar el TLCAN porque “sólo beneficia a México”, López Obrador ha dicho que dicho acuerdo comercial sólo trajo desempleo al país.
- A ambos se les compara con personajes políticos no gratos para su país; mientras en Estados Unidos ven similitudes entre Trump y Vladimir Putin, en México a López Obrador se le comparó —en su momento— con Hugo Chávez.
- Trump perdió el apoyo de varios miembros del Partido Republicano; por su parte, todo indica que en 2018 a López Obrador lo abandonarán los partidos de Izquierda, quienes preferirán ir con Mancera.
- Por las actitudes que han mostrado, al parecer la única manera de que ambos acepten el resultado de unas elecciones es si ganan.
