Las trampas de la CNDH en Tanhuato, Nochixtlán, Ayotzinapa y Tlatlaya

El día de hoy, el periódico La Razón ofreció una versión más detallada del informe de la CNDH con respecto al caso Tanhuato, el la cual explica cómo el titular de la CNDH, Luis Raúl González, omitió en la conferencia de prensa del pasado jueves 18 de agosto que los estudios aplicados a los sicarios abatidos en el Rancho Del Sol por elementos federales dieron positivo a las pruebas de rodizonato; lo que significa que estuvieron accionando armas de fuego antes de morir.

En este sentido, los informes de la CNDH revelan que de los 58 testimonios recabados, ninguno pertenece a los 90 elementos federales que estuvieron presentes el día de los hechos.

Es decir que sólo fueron entrevistados los familiares de los caídos y los testigos sobrevivientes que se encuentran presos.

El medio también dio a conocer que hay informes en poder de la Comisión Nacional de Seguridad y la PGR que aseguran que el dueño del rancho fue quien solicitó a los agentes de la policía entrar al lugar cuando se vio despojado de su propiedad por los integrantes del Cártel Jalisco Nueva Generación.

No obstante, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos asegura en sus recomendaciones que la policía entró al lugar de los hechos sin tener orden de cateo.

Pero esta no es la primera vez que la CNDH manipula la información a modo. En por lo menos otros tres casos emblemáticos lo ha hecho. ¿Por qué?

La respuesta es sencilla: porque tienen intereses de por medio –muchos millones, por ejemplo–. Y por eso la comisión defiende a los delincuentes, en lugar de a las víctimas y si no nos cree, a continuación van los ejemplos:

-El 30 de junio de 2014, militares acudieron a San Pedro de Los Limones, Tlatlaya, para responder a una denuncia. Al llegar al lugar, los criminales recibieron a balazos a los militares, quienes respondieron al fuego y acabaron con los agresores.

Las comisiones de derechos humanos inventaron una ejecución extrajudicial para convertir a los criminales en víctimas y a los militares en criminales.

En este caso –y en el resto– el objetivo era obtener recursos bajo el amparo de la Ley de Víctimas.

Sin embargo, 17 de mayo de este año, jueces federales declararon inocentes a los militares.

-Sobre el caso Ayotzinapa ocurrido el 26 de septiembre de 2014, la CNDH dijo que de acuerdo a la declaración de un testigo presencial el día de la desaparición de los normalistas, policías de Iguala, Huitzuco y dos elementos de la Policía Federal participaron en los hechos del pasado 26 de septiembre de 2015.

No obstante, el vocero de los padres de los normalistas Vidulfo Rosales aceptó que los estudiantes murieron quemados y fueron secuestrados por gente de los “Guerreros Unidos”.

-El 19 de junio, 800 policías federales y estatales acudieron a Nochixtlán a liberar un bloqueo carretero de la CNTE. Murieron ocho personas, y aunque en principio los medios acusaron a la policía federal de haber actuado con dolo y haber accionado en contra de los normalistas sin razón, las pruebas y testimonios revelan que los primeros en disparar fueron los docentes y que la primera persona fallecida murió antes de la llegada de los federales.

Al respecto, la CNDH ha declarado que sigue recabando información para emitir sus recomendaciones; no obstante es de esperarse que otra vez acuse a los federales y defienda a los criminales.