En cualquier momento, el PRI definirá a su candidato al gobierno de Sinaloa.
Entre los contendientes se encuentran:
El secretario de gobierno, Gerardo Vargas, cuyo nombre y el logotipo de su organización aparecen en varias bardas de Los Mochis y Culiacán.
El senador Aarón Irizar, rezagado pero firme en la contienda.
Y el alcalde de Mazatlán, Quirino Ordaz, una adición de última hora al grupo de precandidatos.
Sin embargo, al margen de la pugna se encuentra otro priista que lidera las encuestas y que ya fue candidato al gobierno estatal.
Nos referimos a Jesús Vizcarra, quien decidió bajarse de la contienda debido a las versiones que lo relacionan con el crimen organizado. Algunos, incluso, dicen que está fichado por la DEA.
Lo curioso es que, desde el margen, Vizcarra aprovecha su capital político para vetar candidatos. Es así que, en venganza, Vizcarra pidió a su partido que no postule a Gerardo Vargas, la mano derecha del gobernador Mario López Valdez; y extendió el veto al senador Aarón Irizar.
En este escenario, las cosas no pintan bien para el PRI… pues las tensiones internas podrían abrir camino a la candidatura independiente del ex panista y actual diputado, Manuel Clouthier.
Sin embargo, todo indica que, a pesar del veto de Vizcarra, el priista ungido será Gerardo Vargas.
