Las numerosas marchas y bloqueos de la CNTE en varios estados del país –principalmente Oaxaca, Chiapas, Michoacán, Guerrero y la Ciudad de México– han generado disgusto en más de un sector, como el empresarial, pero también han molestado a la sociedad en general.
Al respecto en entrevista para La Otra Opinión, el periodista Roberto Molina comentó que la situación en Oaxaca con los maestros es cada vez más difícil, pues las autoridades no hacen lo correspondiente para resolver el conflicto y los ciudadanos se ven con las manos amarradas debido a que en las familias de la entidad tienen al menos un pariente que pertenece al magisterio.
En este sentido, Molina recordó que hace 30 años contar con un docente en la familia era motivo de supervivencia y orgullo para sus allegados, pero ahora ocurre todo lo contrario.
“En la actualidad los maestros son la mayor amenaza del estado, pero nadie puede protestar, porque hacerlo significa estar en contra de un hijo, un sobrino o un hermano”, resaltó el entrevistado.
Roberto Molina explicó que el magisterio se descompuso cuando el poder del órgano pasó completamente a sus manos y se quedaron con el control de los recursos. De este modo se volvieron obreros y patrones al mismo tiempo.
“Ellos decidieron a quienes contratar y a quienes no, lo que abrió la posibilidad a la venta de plazas y a la industria de la corrupción”, puntualizó el periodista.
