Galileos del PRI… Galileos del PRD

A principios de este año, un puñado de perredistas –liderados por Guadalupe Acosta Naranjo, quien durante años vivió bajo la sombra de los Chuchos–, anunciaron lo que parece otra tribu perredista pero que, según ellos, es sólo una iniciativa al interior de su partido: los Galileos.

Según parecía, Acosta Naranjo había descubierto el hilo negro y no conforme con las incontables agrupaciones perredistas, creó la propia.

Una vez más, los amarillos demostraron que cuando no existe acuerdo, la solución es fraccionar al partido y no negociar una postura común.

En fin, lo curioso en esta historia es que la visión política del señor Acosta Naranjo –líder de los Galileos–, su trayectoria y su conocimiento de la tradición partidista nacional no le alcanzaron para ver que, una vez más, estaba reciclando procesos, propuestas y hasta nombres.

En 1997, cuando al interior del PRI nació otra agrupación llamada Galileo, el entonces presidente nacional tricolor, Mariano Palacios Alcocer, dijo que se trataba de “una muestra de vitalidad que enriquece la vida del partido”, y advirtió también que los Galileos no debían verse “como un símbolo de fractura o como un atisbo de desmembramientos”.

¡Prácticamente las mismas palabras..!

Irónicamente, el nuevo grupo de galileos nace en el PRD, con un mensaje harto similar y con una propuesta que –como pasó con los priistas–, parece condenada al fracaso.

Hace 20 años, los priistas tuvieron sus galileos y a la vuelta de tres años, sufrieron la derrota más dolorosa en su historia. Hoy los perredistas viven una de sus peores crisis y ya tienen sus propios galileos. ¿Reciclarán el resto de la historia tricolor?