Todo indica que después de que la CNTE pidió establecer mesas de diálogo con la Secretaría de Gobernación, la acción se puso de moda. En este momento, no sólo los maestros, sino también las víctimas de Nochixtlán y los alcaldes de México exigen a la Segob que entable pláticas para atender sus pendientes.
Y es que, después de los asesinatos de dos alcaldes –ocurridos el pasado fin de semana uno en Guerrero y otro en Chiapas–, el presidente de la Asociación Nacional de Alcaldes, Enrique Vargas del Villar, aseguró en entrevista para La Otra Opinión que es preciso reunirse con las autoridades a fin de que se establezcan protocolos de seguridad que garanticen la vida de los presidentes municipales.
Para Enrique Vargas, es importante tomar medidas a raíz de las ejecuciones de sus homólogos pues los grupos delincuenciales se están apoderando de los municipios y eso debe frenarse.
De acuerdo con la información del entrevistado, desde 2003 han sido asesinados un total de 40 alcaldes y siete ediles electos, lo que pone en evidencia que el riesgo es igual para todos los ciudadanos, sin importar el cargo o la entidad.
El también presidente municipal de Huixquilucan explicó a este medio que para combatir a los criminales es necesario mejorar el armamento de seguridad pública, pues se sabe que las mafias poseen equipo bélico superior al de las autoridades y por eso han logrado someterlas en varios puntos del país.
“Los alcaldes son el primer contacto del gobierno con los ciudadanos”, concluyó Vargas y consideró que precisamente por su función es que se se les debe dar la confianza para administrar su territorio sin complicaciones que pongan en riesgo su vida.
