A 26 días de las elecciones, todo indica que el PRI tiene el triunfo asegurado en seis entidades:
Uno. En Hidalgo, donde una encuesta de El Financiero le da una ventaja al priista Omar Fayad de más de 20 puntos. Ahí no hay dudas, a pesar de los reclamos contra Fayad, de sus escándalos y de que, hace días, lo corrieron de un municipio; su triunfo parece innegable.
Dos. En Chihuahua. Como hemos repetido en numerosas ocasiones, la candidatura del panista Javier Corral no crece. De hecho, cada vez son más los que opinan que el independiente José Luis “Chacho” Barraza podría disputar el triunfo. No obstante, todos los sondeos dan el triunfo al priista Enrique Serrano.
Tres. En Durango. El candidato de alianza, José Rosas Aispuro, tampoco logró crecer. Todas las evidencias apuntan a que será derrotado una segunda ocasión y que el priista, Esteban Villegas será el elegido.
Cuatro. En Sinaloa. Los partidos de oposición son tan malos –y sus candidatos tan chiquitos–, que un candidato “malón” como Quirino Ordaz tiene el triunfo en la bolsa.
Cinco. En Zacatecas. Ni con el apoyo del delegado Ricardo Monreal, el candidato de Morena David Monreal podrá ganar en su estado. Los dedos apuntan a que el vencedor será el tricolor Alejandro Tello. Tampoco la alianza entre el PAN y el PRD –con Rafael Flores–, podrán frenar al PRI.
Y seis. En Oaxaca. La oposición atomizada abrió el camino al PRI que, en los hechos, tiene la victoria en la bolsa.
