El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) presentó un informe en el que indica que 4.1 millones de niños mexicanos entre tres y 17 años se encuentran fuera del sistema escolar.
En el reporte indicó además que de 100 niños que comienzan en preescolar, 57 de ellos abandonan sus estudios antes de terminar el bachillerato; es decir que más de 600 mil estudiantes se encuentran en riesgo de abandonar las aulas para siempre.
Según el documento, los niños que más tienden a estar en esta situación son los que viven en zonas indígenas y comunidades con pocos recursos ya que no pueden sustentar los gastos de traslado, útiles escolares y alimentación.
Las cifras del Unicef son lamentables; sin embargo, no contemplan a todos los niños perjudicados por los paros laborales de la CNTE, los cuales desertan en la espera de volver a clases o se retrasan y llegan tarde al mercado laboral.
En julio de este año, se informó que en dos meses sin clases por el conflicto magisterial, más de 155 mil alumnos de distintos niveles educativos quedaron afectados en Chiapas, Michoacán y Guerrero, y más de un millón en Oaxaca
Es así como en La Otra Opinión creemos que además de la pobreza, la falta de infraestructura y las malas políticas educativas que durante años permearon en el sistema, la CNTE es el otro organismo culpable del rezago educativo en México.
