Parece ser que Javier Duarte, César Duarte, Roberto Borge y Rodrigo Medina están más solos que nunca en una limpieza que comenzó su partido. Luego de los señalamientos de corrupción —realizados por la opinión pública, la prensa y los partidos de oposición— en contra de estos tres gobernadores y exgobernador emanados del PRI, la dirigencia del tricolor y el presidente Enrique Peña Nieto, descartaron “meter mano” a su favor.
Ahora, la Comisión Nacional de Justicia Partidaria del PRI anunció que los dos Duarte, Borge y Medina serán sometidos a un proceso que podría derivar en su expulsión del partido.Y es que el pasado 21 de julio, el consejero político del PRI, Armando Barajas, pidió la suspensión de los derechos de militante de estos cuatro priistas, con fundamento en las denuncias de corrupción presentadas en contra de los mandatarios. y exgobernador
Casi un mes después, y ante las denuncias presentadas por la Auditoría Superior de la Federación y las irregularidades durante la gestión de los mencionados gobernadores, el presidente de la Comisión de Justicia del tricolor, Fernando Elías Calles informó que solicitará a los órganos estatales del partido pruebas en contra de estos personajes. Asimismo, indicó que se investigará al exgobernador de Nuevo León, Rodrigo Medina, quien actualmente se encuentra vinculado a proceso por ejercicio indebido de funciones.
Así, el PRI se suma a la “cacería de brujas” que se ha desatado en contra de los gobernadores corruptos.
Cabe señalar que el dirigente nacional, Enrique Ochoa Reza afirmó que el tricolor deberá “limpiar la casa” de la corrupción. ¿Serán los Duarte, Borge y Medina las primeros en ser “limpiados” del “nuevo PRI”? La mala reputación de este cuarteto es un lastre para la nueva imagen que el partido intenta construir, por lo que la posibilidad de una expulsión está latente.
Por lo pronto, este cuarteto deberá enfrentar tanto a la justicia partidista como a la ordinaria. ¿Llegarán ambos juzgadores a la misma resolución?
