Educación pública, ¿El negocio privado de la CNTE?

De acuerdo con el Artículo 3 de la Constitución, “toda la educación que el Estado imparta será gratuita”, pero en Chiapas la CNTE se empeña en convertir la educación pública en un negocio privado y lucrativo.

Luego de que el fin de semana la Sección 7 de la CNTE en Chiapas anunció el fin de su paro laboral de casi cuatro meses, todo parecía indicar que la situación educativa en esta entidad podría comenzar a normalizarse de manera paulatina. Sin embargo, este lunes, miembros del magisterio disidente argumentaron que no darían clases debido a que muchos estudiantes incumplieron con su trámite de inscripción y el pago de cuotas escolares.

Con el pretexto de que se requieren recursos para el mantenimiento de los planteles educativos, algunos maestros adheridos a la CNTE exigieron a padres de familia cubrir cuotas que —de acuerdo con información de Excélsior— van de los 400 a los 500 pesos por alumno en el nivel preescolar; de los 500 a los 700 pesos en escuelas primarias; y de 600 a 900 en secundarias.

Asimismo, Excélsior detalla que el cobro de cuotas se realizó bajo amenaza, pues se advierte a los padres de familia que de incumplir con el pago, se impedirá a sus hijos el ingreso a las escuelas. La publicación detalla que ante esta situación, algunos padres de familia incluso tuvieron que recurrir al empeño de sus bienes en casas de préstamo con el fin de cubrir las cuotas y garantizar la inscripción de sus hijos.

¿Dónde está aquella CNTE que se decía defensora de la educación pública y gratuita y que denunciaba su privatización?

Cabe recordar que si bien la aportación voluntaria de padres de familia para el mantenimiento de escuelas está permitida, el cobro de cuotas obligatorias es ilegal, por lo que para muchos estas acciones de la CNTE se asemejan a prácticas de extorsión.

Además, de acuerdo con estudios del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), Chiapas, Oaxaca y Guerrero —estados con mayor presencia de la Coordinadora— son las entidades más pobres del país. En Chiapas se estima que el 32 por ciento de la población vive en pobreza extrema, por lo que el cobro de cuotas puede ser particularmente difícil de costear en esta entidad.

Eso sí, la CNTE exige al gobierno adecuar la evaluación docente a las condiciones de cada estado. Sin embargo, el magisterio disidente se muestra incapaz de solidarizarse con la situación económica de las familias chiapanecas.

Por ello, algunos se preguntan, ¿La lucha de la CNTE en realidad es por la educación? ¿O es por sus intereses laborales y económicos? ¿No será que quieren lucrar con la educación?