Luego de la liberación de Rubén Núñez y de Francisco Villalobos, líderes de la CNTE, el coordinador de la bancada del PRD en el Senado, Miguel Barbosa, consideró que están dadas las condiciones para que la Coordinadora ponga fin a las marchas y bloqueos en estados como Oaxaca, Chiapas, Michoacán, Guerrero y la Ciudad de México.
El perredista reconoció que la liberación de los líderes de la CNTE es un paso importante para resolver el conflicto y para pasar de una etapa de confrontación a una de negociación, pues es más adecuado “construir una ruta de negociación con los dirigentes magisteriales en libertad”. Además,Barbosa afirmó que como el diálogo con la Coordinadora se mantiene abierto, no hay impedimentos para que inicie sin contratiempos este 22 de agosto.
Mientras Miguel Ángel Osorio Chong, secretario de Gobernación, mantiene diálogos con la CNTE y Aurelio Nuño, secretario de Educación, insiste en que la Reforma Educativa es innegociable; la presidenta del PRD, Alejandra Barrales, acordó una mesa de trabajo legislativo para que los legisladores perredistas den “cauce institucional” a las propuestas de la Coordinadora. Cabe señalar que el mismo PRD votó a favor de la aprobación de la Reforma Educativa, pero eso sí, pretenden modificarla, más no tumbarla.
Entre otros de los que apoyan a la CNTE, Andrés Manuel López Obrador y los diputados y senadores de Morena —que incluso han sido vistos en marchas en apoyo a la CNTE— conforman otro grupo que pretende inclinar la balanza del lado de la Coordinadora y por ende, en contra del Gobierno federal.
Por su parte, la iglesia católica es otro grupo cuyos desencuentros con el Gobierno federal han llevado a apoyar a la CNTE, pero a la vez a reprobar sus acciones y posicionarse a favor de la “no violencia”.
Del otro lado de la balanza se ubican los gobiernos estatales, que en su totalidad se han solidarizado con el Gobierno federal y de la Reforma. Asimismo, el resto del Congreso y los partidos políticos —PRI y PAN— avalan la Reforma Educativa.
Y ante los bloqueos que ha mantenido el magisterio, la Iniciativa Privada ha pedido que se aplique la ley.
Este panorama, en el que el PRI, el PAN, los gobiernos locales y el Gobierno federal están a favor de la Reforma Educativa; la CNTE y Morena en contra y —aparentemente la iglesia y el PRD como contrapeso— explica por qué las negociaciones para resolver el conflicto magisterial se encuentran tan trabadas. ¿Hacia dónde se inclinará la balanza al final?
