Congreso HIV en Las Américas: A tomarse el Sida en serio

América Latina carece de una estrategia articulada para enfrentar el VIH/Sida. Un importante grupo de expertos que estudian esta epidemia desde la medicina, la investigación y la prevención coincidieron en que el acceso a los medicamentos antirretrovirales no ha beneficiado ni ofrecido los resultados esperados ya que una de cada dos personas que viven con esta infección lo desconoce, por lo cual tampoco está bajo tratamiento.

Al reto de detectar a esos cientos de miles de personas hay que agregar la falta de recursos destinados a sustentar la lucha contra la epidemia, que ya rebasa las tres décadas, así como los factores culturales y de género que alejan a las poblaciones clave de los servicios de salud. Por este contexto adverso es que no se podrá cumplir con las metas de control establecidas por el Programa Conjunto de las Naciones Unidas para el VIH/Sida (ONUSIDA).

Lo anterior fue expuesto por diferentes investigadores y médicos clínicos reunidos del 28 al 30 de abril en el IV Congreso HIV & HEP de Las Américas 2016, en la Ciudad de México, en el que además se presentaron estudios y análisis respecto a la evolución de la infección, las innovaciones de fármacos y las estrategias que pueden seguirse para fortalecer acciones preventivas que permitan disminuir la transmisión y controlar este virus.

Si bien se trató de un encuentro continental, quedó nuevamente de manifiesto que en los Estados Unidos y Canadá el VIH/Sida tiene una configuración distinta a la que se enfrenta en América Latina y el Caribe, donde un equipó de clínicos redacta la primera guía de manejo antirreviral regional.

Este Congreso es la respuesta de los médicos latinoamericanos al desafío mundial de encontrar respuestas regionales para controla la epidemia. El comité coordinador lo forman Mauro Schechter, Juan Sierra-Madero, Pedro Cahn, Roy Gulick, Carlos del Rio e Ian Weller, quienes reciben fondos privados para convocar a otros médicos y abrir de esa manera canales directos de comunicación e intercambio de información así como de experiencias. En este cuarto encuentro se incorporó la Hepatitis C en el programa científico, como parte de la preocupación clínica porque al igual que el VIH, representa también un problema global sanitario.

Hubo 503 participantes, provenientes de 32 países. El 49.3% de México (por ser la sede en esta ocasión); el 39.3% de países latinoamericanos y caribeños; el 6.6% de Estados Unidos y Canadá; y el 4.8% de otras regiones.

El programa constó de 5 conferencias magistrales; 2 mesas redondas; 5 sesiones plenarias; 1 sesión en colaboración con la Organización Panamericana de la Salud y una más con la Asociación Internacional de Sida; 1 sesión de revisión de datos y discusión; y 2 simposios satelitales de industria. Se aceptaron para exhibición 50 posters con contenidos clínicos, sociales y de género, así como 6 participaciones orales.

Los principales temas abordados fueron: detección de VIH, prevención, guías de tratamiento, mortalidad, transmisión perinatal, mujeres y niños, Hepatitis C.