Es interesante observar el proceso electoral que desarrollan los estadounidenses para elegir a su nuevo Presidente o Presidenta. Si todo les copiamos, conscientes de que gane quien gane, de todos modos nos irá mal, los mexicanos deberíamos aprenderles algo más, por ejemplo, sus debates y sus comicios preliminares.
Dado que este año don Obama termina su mandato como Presidente de los EU, sus gobernados se aprestan a elegir al sucesor. La fecha de la elección es noviembre próximo, ya que, iniciando el año que viene, el nuevo mandatario debe empezar su gestión. Por ello, desde hace varios meses los aspirantes andan en campaña.
Como todos saben, en Estados Unidos hay dos partidos preponderantes, el Republicano y el Demócrata. Al Republicano han pertenecido Presidentes como Abraham Lincoln, y al Demócrata, personajes como John F. Kennedy. Ambos Partidos, como que se van turnando el usufructo del poder político en ese país. Es decir, a veces gana el candidato de uno y a veces gana el candidato del otro. Igual con los integrantes del Congreso que, en ese país, a diferencia del de México, sí es un verdadero contrapeso al Poder Ejecutivo.
Según entiendo, en el momento adecuado, quienes desde el Republicano y el Demócrata, suspiran por ser Presidente de EU, levantan la mano, se apuntan y hacen campaña entre sus respectivos correligionarios. Si hay mas de un aspirante, esos Partidos organizan debates, varios debates, 3, 4, 10 debates, o los que sean necesarios. Y son debates públicos, en televisión y toda la cosa.
Hacen asambleas populares, para sondear la opinión de los votantes. Después realizan elecciones internas para elegir delegados a sus correspondientes Convenciones electorales; eso fue parte de lo que ocurrió durante el llamado “supermartes”, o sea el martes 1 de marzo, que fue cuando ambos Partidos eligieron, en varios Estados a muchos de sus Delegados. Y esos delegados son los que eligen a sus respectivos candidatos.
En México, nuestros HH Partidos políticos registrados, casi nunca organizan debates entre los aspirantes y el método utilizado para “elegir” a los candidatos, es la encuesta. Se elige no al que tiene mejores propuestas y argumentos, o más votos, sino al mas guapo, o guapa, y mas famoso. Nuestra democracia, como en muchas otras situaciones, va a la cola de EU y de otros países.
Así que de acuerdo a las últimas noticias, por el Partido Demócrata quien se perfila como su candidata a la Presidencia es la esposa del ex Presidente Bill Clinton, o sea, doña Hillary Clinton (se fijan mis estimados, en EU la esposa adopta el apellido del esposo. Qué curioso); y por el Partido Republicano, quien va muy adelante es el empresario Donald Trump.
Entonces, si no suceden imprevistos, esos dos personajes, apoyados por sus respectivos Partidos, serán los contrincantes en las elecciones de noviembre, por la Presidencia del país más poderoso del mundo. ¿Quién ganará?
Creo que para nosotros, los mexicanos, la respuesta es lo de menos. Porque quien quede al frente del gobierno norteamericano, va a defender, como siempre lo han hecho, los intereses de su país, aunque tengan que aplastar los derechos e intereses de otras naciones, como lo han hecho, y aunque los otros sean buenos vecinos o buenos socios, como México.
Véase el caso de don Obama, el Presidente saliente de los EU que, en México cuenta con la simpatía de mucha gente que se dice progresista y de izquierda. Sin embargo, en el record de don Obama, está el hecho de que su gobierno ha deportado a dos millones de mexicanos. No es poco el agravio hecho a sus simpatizantes.
Así que gane Clinton o gane Trump, u otro, la Presidencia de los EU, para nosotros será lo de menos. Lo de más, es lograr perfeccionar nuestra democracia. O ustedes ¿qué opinan estimados cuatro o cinco lectores?
Notitas: Una.- Que ya empezó el negocio de las encuestas electorales rumbo al 2018. ¿Para qué? Todas se equivocan. Dos.- Que PEMEX, entidad que gracias a la reforma energética pasó de ser “empresa paraestatal”, a “empresa productiva del Estado”, se ha vuelto improductiva, pues le recortaron 130 mil millones de pesos. Tres.- Que en una demarcación de la CDMX, Miguel Hidalgo, gobernada por el PAN, se invirtieron los roles: en lugar de que los ciudadanos vigilen a los servidores públicos, son éstos – como un tal Arne aus den Ruthen, mediante periscope – los que vigilan a los ciudadanos. Cuatro.- Que por muy sesgado, exagerado y politizado que sea el Informe que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, ha presentado sobre la situación de ese tema en México, el gobierno federal debiera aceptar que hay mucho por hacer en esa materia. Cinco.- Que luego de 57 años, uff, de su heroica revolución, en Cuba se van a presentar… ¡los Rolling Stones!, el próximo 25 de marzo. Seis.- Que el martes 8 de marzo, se lleva al cabo la conferencia titulada “La Religión, ¿qué es?”, a cargo del Maestro Jorge A. Villamil Rivas. Es a las 19 horas, en la CDMX, calle Concepción Béistegui 107, colonia del Valle, cerca de Insurgentes sur, a la altura del Polyforum Cultural Siqueiros. Siete.- Que el joven licenciado en Ciencias políticas, José Luis Gallegos, asesor del Presidente nacional del PRD, me informa que escribió una reseña de mi libro, “Cuando correteábamos utopías”, en el sitio Web, themexicantimes.mx. Gracias. Otras amables personas también han escrito sobre dicha obra. Como…., mejor pronto compartoles, sus interesantes textos. Por cierto, la próxima presentación de mi libro es el 29 de marzo, en la UAM Azcapotzalco. Ocho.- Que se los dije: El Oscar a la mejor película fue para “En Primera Plana” (SpotLight). Quien sabe por qué en México, no la difunden. ¿Será porque es una crítica razonable, a los comportamientos inmorales de algunos miembros de la iglesia católica? Nueve.- Que pese a todo, hay que moverse, haciendo ejercicio y sembrar un árbol cada año. ¡No a la vida sedentaria!
