"APAGÓN ANALÓGICO", ¿VA O SE POSPONE?

A unos meses de que se cumpla el plazo para el llamado “apagón analógico”, aún no hay certeza de que el gobierno lo llevará a cabo sin retrasos o si, por el contrario, dará una prórroga para las televisoras que no pudieron o quisieron prepararse.

Sin embargo, hay indicios de que el “apagón analógico” podría posponerse.

El PRI, el PAN y el PRD ya propusieron una prórroga. El senador panista Javier Lozano, uno de los impulsores de la Reforma de Telecomunicaciones que estableció el plazo, declaró que, “aunque la Secretaría de Comunicaciones y Transporte y el Ifetel han cumplido con lo establecido en la ley, parece necesario un margen mayor de tiempo para que no se afecten a tantos televidentes mexicanos, a tantas familias que reciben hoy solamente la señal analógica”. En el mismo sentido se pronunciaron Manlio Fabio Beltrones y Carlos Navarrete, dirigentes del tricolor y el Sol Azteca, respectivamente .

Asimismo, esta mañana Emilio Azcárraga Jean, presidente del Consejo de Administración de Grupo Televisa, dijo en entrevista con Ciro Gómez Leyva que su empresa se encuentra preparada para el “apagón analógico”, pero advirtió que muchas televisoras locales no lo están y que serán millones de mexicanos los que podrían quedarse sin señal de televisión en caso de que el “apagón” se concrete en las fechas establecidas.

Independientemente de filias y fobias, Azcárraga tiene argumentos válidos. El ejemplo de esto es Nuevo León, donde se concluyó la transición de señal analógica a digital a fines de septiembre. Según los datos disponibles, sólo en Monterrey entre 450 mil y 650 mil personas se quedaron sin señal de televisión. Pues, a pesar de los esfuerzos del gobierno federal –que repartió casi 180 mil televisores en Monterrey para captar señal digital–, fueron miles los hogares que no pudieron adquirir un nuevo televisor ni instalar el decodificador necesario para que los dispositivos analógicos.

Se estima que a nivel nacional, serían cerca de 10 millones de personas las que quedarían con una televisión inservible.

Con todo lo anterior, cabe hacer las siguientes preguntas: ¿México está preparado para el “apagón analógico”?, si no es en enero, ¿cuándo?, ¿conviene establecer una prórroga?, y cuando se cumpla esa hipotética prórroga,¿entonces sí habrá “apagón”?